Os voy a hablar, del refuerzo intermitente variable.
El refuerzo aparece de vez en cuando, sin que haya un patrón, por lo tanto nunca sabes cuándo va a tocarte.
Es el sistema que tienen las máquinas tragaperras. Y engancha, mucho.
Es el sistema que tienen las máquinas tragaperras. Y engancha, mucho.
Ahora os voy a hacer un símil, con ciertas personas a las que a veces nos enganchamos, y usan este mismo sistema.
Son personas, a las que das y das, y de repente un día, te corresponden.
Tú, te ilusionas, y sigues dando. Aún con más intensidad. Como los que meten monedas en la máquina. Y cuando estás ya casi a punto de rendirte porque no has vuelto a verte correspondido, de nuevo te dan un poco (te llaman, recibes algo de cariño, se interesan por ti) Premio! Otra vez te ilusionas, y sigues dando más aún. Porque estás a tope, te han hecho caso!
En algún momento te planteas dejarlo, porque estás perdiendo mucho, pero cómo vas a dejarlo si ya llevas invirtiendo tanto? Por lo tanto, sigues, creyendo que en algún momento te va a tocar el premio gordo.
Y así, amigos y amigas, vamos cayendo en la adicción, en la esperanza de que al final nos toque, y conformándonos con 5 céntimos de vez en cuando, mientras estamos echando cientos de euros.
Y, nos destroza.
Lo más seguro, es que nunca te toque el premio gordo.
Pero qué difícil es marcharse, cuando aún nos quedan algunas monedas y seguimos pensando que hay alguna posibilidad.
No dejes que te desplumen. Ni la cartera. Ni el corazón.
No hay comentarios:
Publicar un comentario