Agatón decía sobre el pasado: que ni siquiera Dios puede cambiarlo. Y el poeta Rimbaud escribió sobre el futuro: A l'aurore, armés d'une ardente patience, nous entrerons aux splendides villes. (Al amanecer, armados de una ardiente paciencia entraremos en las espléndidas ciudades.) Y añadía el Maesto Neruda: debo decir a los hombres de buena voluntad, a los trabajadores, a los poetas, que el entero porvenir fue expresado en esa frase de Rimbaud: solo con una ardiente paciencia conquistaremos la espléndida ciudad que dará luz, justicia y dignidad a todos los hombres. Así la poesía no habrá cantado en vano.
Seguro que no será el año 2010. Pero por esos somos pacientes. Porque creemos en la dignidad, la justicia, y sobretodo en el ser humano.
Feliz año 2010 a todos.
EN INDIFERENCIA
¿Qué importa el año nuevo, el año viejo?
No es que el tiempo se vaya, es que nos vamos,
e involuntariamente celebramos
el triunfo de la muerte. No me quejo
de que se acerque inexorable; dejo
su amenaza al olvido. ¿Qué alcanzamos
con su presencia en el recuerdo? Estamos
a igual distancia en duelo o en festejo.
Despida al treinta y uno de diciembre
el cazador de fábulas, y siembre
a su paso utopías e intenciones.
Este es un día más, o un día menos;
todos los días son malos o buenos
conforme a nuestras propias decisiones.
Francisco Alvarez
Si fuese posible curar las penas con el llanto y resucitar a los muertos con las lágrimas, el oro sería menos valioso que la tristeza. Sófocles, Escirios. Frag 510
martes, 29 de diciembre de 2009
domingo, 20 de diciembre de 2009
Felices Fiestas
No me gusta que se hable de un pasado mejor porque tendemos a embellecer algo que nunca existió, tampoco me gusta ya que nadie hable del futuro perfecto que nos espera porque es un engaño. Me contento con lo que podamos hacer hoy y ahora, lo que podemos mejorar en este momento. Por eso intento dejar un poco mejor el mundo que encontré. Algo que deberíamos intentar todos los seres humanos. Un año más la Navidad se acerca a nosotros, y dejando de lado lo que cada uno de nosotros piense sobre estas fiestas, me gustariá por lo menos desearos lo mejor para el año próximo.
NAVIDAD 2009
La Navidad llama a la puerta
es tiempo de ilusión,
corren aires de fiesta
alegrando el corazón.
El recuerdo de aquel Niño,
nacido en humilde cuna,
comparto con cariño
junto a las personas que quiero,
con todas, una a una,
las que están y las que se fueron.
Y os deseo lo mejor,
salud, felicidad y alegría.
Navidad con amor
siempre en vuestra compañía.
NAVIDAD 2009
La Navidad llama a la puerta
es tiempo de ilusión,
corren aires de fiesta
alegrando el corazón.
El recuerdo de aquel Niño,
nacido en humilde cuna,
comparto con cariño
junto a las personas que quiero,
con todas, una a una,
las que están y las que se fueron.
Y os deseo lo mejor,
salud, felicidad y alegría.
Navidad con amor
siempre en vuestra compañía.
sábado, 19 de diciembre de 2009
En algún lugar
Dos de las mejores voces de la canción gótica holandesa. Sin duda, la de Sharon den Adel, vocalista del grupo Within Temptations. También la de Anneke van no sé qué. La canción: Somewhere.
Perdida en la oscuridad
esperando una señal.
Sin embargo sólo hay silencio.
¿No puedes oir mis gritos?
Sin perder nunca la esperanza,
necesito saber dónde estás.
Pero una cosa es segura:
estás siempre en mi corazón.
Perdida en la oscuridad
esperando una señal.
Sin embargo sólo hay silencio.
¿No puedes oir mis gritos?
Sin perder nunca la esperanza,
necesito saber dónde estás.
Pero una cosa es segura:
estás siempre en mi corazón.
lunes, 14 de diciembre de 2009
Nuestro adiós
Todas las noches pongo esta canción y la escucho una y otra vez. Me pone algo triste pero me consuela en mi soledad.
En mis manos
Una herencia de memorias
Puedo oírte decir mi nombre
También puedo verte sonreír
Sentir el calor de tu abrazo
Pero no hay nada salvo el silencio
Alrededor del que amo
¿Este es nuestro adiós?
Querido te preocupas demasiado, mi niño
Veo la tristeza en tus ojos
No estás solo en esta vida
A pesar de que pienses que lo estás
Nunca pensé
Que este día llegaría tan pronto
No tuvimos tiempo de decirnos adiós
¿Cómo puede continuar el mundo solo?
Me siento tan perdida cuando no estás a mi lado
Pero no hay nada, el silencio
Alrededor del que amo
¿Este es nuestro adiós?
Querido te preocupas demasiado, mi niño
Veo la tristeza en tus ojos
No estás solo en esta vida
A pesar de que pienses que lo estás
Lo siento, tu mundo se viene abajo
Yo te miraré todas las noches
Inclina tu cabeza y duerme
Porque ni niño, éste no es nuestro adiós
Este no es nuestro adiós
En mis manos
Una herencia de memorias
Puedo oírte decir mi nombre
También puedo verte sonreír
Sentir el calor de tu abrazo
Pero no hay nada salvo el silencio
Alrededor del que amo
¿Este es nuestro adiós?
Querido te preocupas demasiado, mi niño
Veo la tristeza en tus ojos
No estás solo en esta vida
A pesar de que pienses que lo estás
Nunca pensé
Que este día llegaría tan pronto
No tuvimos tiempo de decirnos adiós
¿Cómo puede continuar el mundo solo?
Me siento tan perdida cuando no estás a mi lado
Pero no hay nada, el silencio
Alrededor del que amo
¿Este es nuestro adiós?
Querido te preocupas demasiado, mi niño
Veo la tristeza en tus ojos
No estás solo en esta vida
A pesar de que pienses que lo estás
Lo siento, tu mundo se viene abajo
Yo te miraré todas las noches
Inclina tu cabeza y duerme
Porque ni niño, éste no es nuestro adiós
Este no es nuestro adiós
domingo, 13 de diciembre de 2009
viernes, 4 de diciembre de 2009
martes, 1 de diciembre de 2009
Gente Buena
Hace unas semanas que alguien me decía que la transmisión de valores estaba muy directamente relacionado con lo aprendido en el núcleo familiar en que se vive y con el nivel formativo y cultural de los padres. Yo no creo que exista una relación tan marcada, aunque si es cierto que ese nivel te permite definir mejor todos esos valores. Conozco gente muy poco instruida con una forma de vida encomiable, y también a personas con un buen nivel formativo que simplemente son unos miserables.
Cuando hablo de estas cosas, siempre me acuerdo de mi madre, una persona sin estudios, pero con gran valor humano que siempre intentó trasmitir a sus hijos. Y aunque ya hace tres años que desapareció, todo aquel conocimiento que me trasmitió para que intentara ser una buena persona me acompaña en mi vida como si fuera la primera vez que lo escuché.
En una sociedad que entroniza -con los hechos y con las referencias cotidianas que se nos proponen- el cinismo, la fama sin méritos, la ausencia de escrúpulos, la competitividad desmedida, la picaresca, el enriquecimiento rápido y a cualquier precio, la ostentación, la apariencia… cada vez me gusta más la buena gente. Las personas que nunca tendrán protagonismo mediático, pero que han abrazado durante toda su vida conceptos tan en desuso como la autenticidad, la buena educación, la honradez, el esfuerzo, el respeto o el hacer el bien.
Ésa es la verdadera nobleza. No se plasma en pergaminos ni en títulos aristocráticos. Pero a veces, sólo a veces, también resulta ser hereditaria.
Alguien dijo una vez: "solo muere quien deja de ser recordado". Yo lo creo así, a veces me acuerdo de toda aquella gente buena que conocí y que ahora ya no puedo disfrutar de su presencia. Personas que no se doblegaron en momentos difíciles de su vida. Y que siempre supieron mantener la fe y la creencia de que otro mundo mejor sería posible.
Y seguro que ahora cualquiera de vosotros también tenéis en este mismo momento, en vuestro recuerdo, a todas esas maravillosas personas que os acompañaron a lo largo de vuestra vida. Y es cierto "solo muere quien deja de ser recordado".
MOMENTOS FELICES
Cuando llueve y reviso mis papeles, y acabo
tirando todo al fuego: poemas incompletos,
pagarés no pagados, cartas de amigos muertos,
fotografías, besos guardados en un libro,
renuncio al peso muerto de mi terco pasado,
soy fúlgido, engrandezco justo en cuanto me niego,
y así atizo las llamas, y salto la fogata,
y apenas si comprendo lo que al hacerlo siento,
¿no es la felicidad lo que me exalta?
Cuando salgo a la calle silbando alegremente
—el pitillo en los labios, el alma disponible—
y les hablo a los niños o me voy con las nubes,
mayo apunta y la brisa lo va todo ensanchando,
las muchachas estrenan sus escotes, sus brazos
desnudos y morenos, sus ojos asombrados,
y ríen ni ellas saben por qué sobreabundando,
salpican la alegría que así tiembla reciente,
¿no es la felicidad lo que se siente?
Cuando llega un amigo, la casa está vacía,
pero mi amada saca jamón, anchoas, queso,
aceitunas, percebes, dos botellas de blanco,
y yo asisto al milagro —sé que todo es fiado—,
y no quiero pensar si podremos pagarlo;
y cuando sin medida bebemos y charlamos,
y el amigo es dichoso, cree que somos dichosos,
y lo somos quizá burlando así la muerte,
¿no es la felicidad lo que trasciende?
Cuando me he despertado, permanezco tendido
con el balcón abierto. Y amanece: las aves
trinan su algarabía pagana lindamente:
y debo levantarme pero no me levanto;
y veo, boca arriba, reflejada en el techo
la ondulación del mar y el iris de su nácar,
y sigo allí tendido, y nada importa nada,
¿no aniquilo así el tiempo? ¿No me salvo del miedo?
¿No es la felicidad lo que amanece?
Cuando voy al mercado, miro los abridores
y, apretando los dientes, las redondas cerezas,
los higos rezumantes, las ciruelas caídas
del árbol de la vida, con pecado sin duda
pues que tanto me tientan. Y pregunto su precio,
regateo, consigo por fin una rebaja,
mas terminado el juego, pago el doble y es poco,
y abre la vendedora sus ojos asombrados,
¿no es la felicidad lo que allí brota?
Cuando puedo decir: el día ha terminado.
Y con el día digo su trajín, su comercio,
la busca del dinero, la lucha de los muertos.
Y cuando así cansado, manchado, llego a casa,
me siento en la penumbra y enchufo el tocadiscos,
y acuden Kachaturian, o Mozart, o Vivaldi,
y la música reina, vuelvo a sentirme limpio,
sencillamente limpio y pese a todo, indemne,
¿no es la felicidad lo que me envuelve?
Cuando tras dar mil vueltas a mis preocupaciones,
me acuerdo de un amigo, voy a verle, me dice:
«Estaba justamente pensando en ir a verte».
Y hablamos largamente, no de mis sinsabores,
pues él, aunque quisiera, no podría ayudarme,
sino de cómo van las cosas en Jordania,
de un libro de Neruda, de su sastre, del viento,
y al marcharme me siento consolado y tranquilo,
¿no es la felicidad lo que me vence?
Abrir nuestras ventanas; sentir el aire nuevo;
pasar por un camino que huele a madreselvas;
beber con un amigo; charlar o bien callarse;
sentir que el sentimiento de los otros es nuestro;
mirarme en unos ojos que nos miran sin mancha,
¿no es esto ser feliz pese a la muerte?
Vencido y traicionado, ver casi con cinismo
que no pueden quitarme nada más y que aún vivo,
¿no es la felicidad que no se vende?
Gabriel Celaya
Cuando hablo de estas cosas, siempre me acuerdo de mi madre, una persona sin estudios, pero con gran valor humano que siempre intentó trasmitir a sus hijos. Y aunque ya hace tres años que desapareció, todo aquel conocimiento que me trasmitió para que intentara ser una buena persona me acompaña en mi vida como si fuera la primera vez que lo escuché.
En una sociedad que entroniza -con los hechos y con las referencias cotidianas que se nos proponen- el cinismo, la fama sin méritos, la ausencia de escrúpulos, la competitividad desmedida, la picaresca, el enriquecimiento rápido y a cualquier precio, la ostentación, la apariencia… cada vez me gusta más la buena gente. Las personas que nunca tendrán protagonismo mediático, pero que han abrazado durante toda su vida conceptos tan en desuso como la autenticidad, la buena educación, la honradez, el esfuerzo, el respeto o el hacer el bien.
Ésa es la verdadera nobleza. No se plasma en pergaminos ni en títulos aristocráticos. Pero a veces, sólo a veces, también resulta ser hereditaria.
Alguien dijo una vez: "solo muere quien deja de ser recordado". Yo lo creo así, a veces me acuerdo de toda aquella gente buena que conocí y que ahora ya no puedo disfrutar de su presencia. Personas que no se doblegaron en momentos difíciles de su vida. Y que siempre supieron mantener la fe y la creencia de que otro mundo mejor sería posible.
Y seguro que ahora cualquiera de vosotros también tenéis en este mismo momento, en vuestro recuerdo, a todas esas maravillosas personas que os acompañaron a lo largo de vuestra vida. Y es cierto "solo muere quien deja de ser recordado".
MOMENTOS FELICES
Cuando llueve y reviso mis papeles, y acabo
tirando todo al fuego: poemas incompletos,
pagarés no pagados, cartas de amigos muertos,
fotografías, besos guardados en un libro,
renuncio al peso muerto de mi terco pasado,
soy fúlgido, engrandezco justo en cuanto me niego,
y así atizo las llamas, y salto la fogata,
y apenas si comprendo lo que al hacerlo siento,
¿no es la felicidad lo que me exalta?
Cuando salgo a la calle silbando alegremente
—el pitillo en los labios, el alma disponible—
y les hablo a los niños o me voy con las nubes,
mayo apunta y la brisa lo va todo ensanchando,
las muchachas estrenan sus escotes, sus brazos
desnudos y morenos, sus ojos asombrados,
y ríen ni ellas saben por qué sobreabundando,
salpican la alegría que así tiembla reciente,
¿no es la felicidad lo que se siente?
Cuando llega un amigo, la casa está vacía,
pero mi amada saca jamón, anchoas, queso,
aceitunas, percebes, dos botellas de blanco,
y yo asisto al milagro —sé que todo es fiado—,
y no quiero pensar si podremos pagarlo;
y cuando sin medida bebemos y charlamos,
y el amigo es dichoso, cree que somos dichosos,
y lo somos quizá burlando así la muerte,
¿no es la felicidad lo que trasciende?
Cuando me he despertado, permanezco tendido
con el balcón abierto. Y amanece: las aves
trinan su algarabía pagana lindamente:
y debo levantarme pero no me levanto;
y veo, boca arriba, reflejada en el techo
la ondulación del mar y el iris de su nácar,
y sigo allí tendido, y nada importa nada,
¿no aniquilo así el tiempo? ¿No me salvo del miedo?
¿No es la felicidad lo que amanece?
Cuando voy al mercado, miro los abridores
y, apretando los dientes, las redondas cerezas,
los higos rezumantes, las ciruelas caídas
del árbol de la vida, con pecado sin duda
pues que tanto me tientan. Y pregunto su precio,
regateo, consigo por fin una rebaja,
mas terminado el juego, pago el doble y es poco,
y abre la vendedora sus ojos asombrados,
¿no es la felicidad lo que allí brota?
Cuando puedo decir: el día ha terminado.
Y con el día digo su trajín, su comercio,
la busca del dinero, la lucha de los muertos.
Y cuando así cansado, manchado, llego a casa,
me siento en la penumbra y enchufo el tocadiscos,
y acuden Kachaturian, o Mozart, o Vivaldi,
y la música reina, vuelvo a sentirme limpio,
sencillamente limpio y pese a todo, indemne,
¿no es la felicidad lo que me envuelve?
Cuando tras dar mil vueltas a mis preocupaciones,
me acuerdo de un amigo, voy a verle, me dice:
«Estaba justamente pensando en ir a verte».
Y hablamos largamente, no de mis sinsabores,
pues él, aunque quisiera, no podría ayudarme,
sino de cómo van las cosas en Jordania,
de un libro de Neruda, de su sastre, del viento,
y al marcharme me siento consolado y tranquilo,
¿no es la felicidad lo que me vence?
Abrir nuestras ventanas; sentir el aire nuevo;
pasar por un camino que huele a madreselvas;
beber con un amigo; charlar o bien callarse;
sentir que el sentimiento de los otros es nuestro;
mirarme en unos ojos que nos miran sin mancha,
¿no es esto ser feliz pese a la muerte?
Vencido y traicionado, ver casi con cinismo
que no pueden quitarme nada más y que aún vivo,
¿no es la felicidad que no se vende?
Gabriel Celaya
domingo, 29 de noviembre de 2009
Jazz de sonoridad renacentista
Para los que no conozcan al músico aleman afincado en España, Andreas Prittwitz (saxofonista, trompetista, clarinetista, flautista...) Un Jazz con gotas renecantistas...
Canción de la lluvia
Acaso está lloviendo también en tu ventana;
Acaso esté lloviendo calladamente, así.
Y mientras anochece de pronto la mañana,
yo sé que, aunque no quieras, vas a pensar en mí.
Y tendrá un sobresalto tu corazón tranquilo,
sintiendo que despierta tu ternura de ayer.
Y, si estabas cosiendo, se hará un nudo en el hilo,
y aún lloverá en tus ojos, al dejar de llover.
José Ángel Buesa
Acaso esté lloviendo calladamente, así.
Y mientras anochece de pronto la mañana,
yo sé que, aunque no quieras, vas a pensar en mí.
Y tendrá un sobresalto tu corazón tranquilo,
sintiendo que despierta tu ternura de ayer.
Y, si estabas cosiendo, se hará un nudo en el hilo,
y aún lloverá en tus ojos, al dejar de llover.
José Ángel Buesa
jueves, 26 de noviembre de 2009
Amparitxu Gastón, la mujer que inventó a un hombre
PEDRO UGARTE 25/11/2009
A veces, cuando se van ciertas personas, parece que con ellas se va toda una época. Amparo Amparitxu Gastón, fallecida en Madrid ayer, 24 de noviembre, a los 89 años, fue cuatro décadas compañera de Gabriel Celaya, pero durante 18 años más preservó con fidelidad su obra y su memoria. El nombre de Amparitxu, y el del poeta extinto, ambos donostiarras (ella nació en San Sebastián un 15 de mayo de 1921), nos remiten a un tiempo en el que la poesía no fue algo históricamente más importante que otras veces, pero sí disfrutó de una engañosa y pasajera relevancia, la elevó ante los ojos del pueblo, y éste la utilizó para levantar banderas y alumbrar utopías. Quizá la poesía nunca ha sido necesaria, pero entonces consiguió parecerlo un poco.
Amparo Gastón firmó algunos libros con Celaya, pero sobre todo asumió el papel (bastante habitual en la biografía de muchos escritores) de ferviente compañera, intendente doméstica, agente, masajista y asistente hospitalaria. Como aquellas casas parroquiales en que una abnegada hermana dedicaba toda su vida a cuidar de un hermano sacerdote, la literatura española también ha estado salpicada de esposas, parejas o compañeras que tutelaban hasta el último día a escritores más o menos distraídos, que, gracias a ellas, tenían las espaldas bien guardadas y podían emprender ambiciosas empresas literarias pero que, en la vida real, no sabían por dónde les daba el aire.
Sin embargo, Amparitxu no sólo fue compañera. Jugó en la biografía de Gabriel Celaya un papel fundamental. Representó una ruidosa detonación, la detonación que cambió para siempre la vida de Rafael Múgica (el nombre real del poeta) y lo convirtió en alguien distinto. Es cierto que la marca Gabriel Celaya representa un acontecimiento totalmente singular en la historia de nuestra literatura: no es un seudónimo, es decir, la adopción utilitaria de otro nombre; ni un heterónimo, es decir, la fingida y literaria adopción de una nueva identidad. No, Gabriel Celaya representó en la vida de Múgica algo mucho más grande, algo distinto: la aparición de un hombre nuevo, y no ya en los papeles sino en la estricta realidad.
'Creó' a Gabriel Celaya
La responsabilidad de la creación de ese hombre nuevo corresponde a Maritxu Gastón. Quizás también por eso su papel difiere un tanto del de eterna acompañante de un escritor. A ella le corresponde un lugar fundacional en la vida de Celaya; es el núcleo que alumbró a un hombre diferente y lo ganó para la literatura.
El cínico mundo de las relaciones literarias está lleno de damas avispadas que embarrancan en las costas de un poeta y operan en sus aledaños como una codiciosa turba de vikingos. Son tantos y tan conocidos los nombres que no merecen particular recordación. Muchos de ellos ni siquiera merecen la estraza del periódico sino el couché que circula por las peluquerías. Pero el caso de Amparitxu no es, desde luego, uno de ellos. Ella no llegó en busca del expolio, ni se acercó a un poeta demenciado tentando sin recato un golpe de estado notarial. Se acercó, muchos años antes, a un hombre, y extrajo el poeta que llevaba dentro. Lo construyó ella misma, lo condujo a lo largo de los años, lo cobijó mientras escribía el verso eterno.
Ayer se fue la mujer que logró todo eso. Y con ella se va también buena parte de una época en que la poesía, que nunca ha sido necesaria, consiguió parecerlo un poco.
OBITUARIO: 'IN MEMÓRIAM'
Amparitxu Gastón, la mujer que inventó a un hombre
Cuando ya nada se espera personalmente exaltante,
mas se palpita y se sigue más acá de la conciencia,
fieramente existiendo, ciegamente afirmado,
como un pulso que golpea las tinieblas,
cuando se miran de frente
los vertiginosos ojos claros de la muerte,
se dicen las verdades:
las bárbaras, terribles, amorosas crueldades.
Se dicen los poemas
que ensanchan los pulmones de cuantos, asfixiados,
piden ser, piden ritmo,
piden ley para aquello que sienten excesivo.
Con la velocidad del instinto,
con el rayo del prodigio,
como mágica evidencia, lo real se nos convierte
en lo idéntico a sí mismo.
Poesía para el pobre, poesía necesaria
como el pan de cada día,
como el aire que exigimos trece veces por minuto,
para ser y en tanto somos dar un sí que glorifica.
Porque vivimos a golpes, porque apenas si nos dejan
decir que somos quien somos,
nuestros cantares no pueden ser sin pecado un adorno.
Estamos tocando el fondo.
Maldigo la poesía concebida como un lujo
cultural por los neutrales
que, lavándose las manos, se desentienden y evaden.
Maldigo la poesía de quien no toma partido hasta mancharse.
Hago mías las faltas. Siento en mí a cuantos sufren
y canto respirando.
Canto, y canto, y cantando más allá de mis penas
personales, me ensancho.
Quisiera daros vida, provocar nuevos actos,
y calculo por eso con técnica qué puedo.
Me siento un ingeniero del verso y un obrero
que trabaja con otros a España en sus aceros.
Tal es mi poesía: poesía-herramienta
a la vez que latido de lo unánime y ciego.
Tal es, arma cargada de futuro expansivo
con que te apunto al pecho.
No es una poesía gota a gota pensada.
No es un bello producto. No es un fruto perfecto.
Es algo como el aire que todos respiramos
y es el canto que espacia cuanto dentro llevamos.
Son palabras que todos repetimos sintiendo
como nuestras, y vuelan. Son más que lo mentado.
Son lo más necesario: lo que no tiene nombre.
Son gritos en el cielo, y en la tierra son actos.
A veces, cuando se van ciertas personas, parece que con ellas se va toda una época. Amparo Amparitxu Gastón, fallecida en Madrid ayer, 24 de noviembre, a los 89 años, fue cuatro décadas compañera de Gabriel Celaya, pero durante 18 años más preservó con fidelidad su obra y su memoria. El nombre de Amparitxu, y el del poeta extinto, ambos donostiarras (ella nació en San Sebastián un 15 de mayo de 1921), nos remiten a un tiempo en el que la poesía no fue algo históricamente más importante que otras veces, pero sí disfrutó de una engañosa y pasajera relevancia, la elevó ante los ojos del pueblo, y éste la utilizó para levantar banderas y alumbrar utopías. Quizá la poesía nunca ha sido necesaria, pero entonces consiguió parecerlo un poco.
Amparo Gastón firmó algunos libros con Celaya, pero sobre todo asumió el papel (bastante habitual en la biografía de muchos escritores) de ferviente compañera, intendente doméstica, agente, masajista y asistente hospitalaria. Como aquellas casas parroquiales en que una abnegada hermana dedicaba toda su vida a cuidar de un hermano sacerdote, la literatura española también ha estado salpicada de esposas, parejas o compañeras que tutelaban hasta el último día a escritores más o menos distraídos, que, gracias a ellas, tenían las espaldas bien guardadas y podían emprender ambiciosas empresas literarias pero que, en la vida real, no sabían por dónde les daba el aire.
Sin embargo, Amparitxu no sólo fue compañera. Jugó en la biografía de Gabriel Celaya un papel fundamental. Representó una ruidosa detonación, la detonación que cambió para siempre la vida de Rafael Múgica (el nombre real del poeta) y lo convirtió en alguien distinto. Es cierto que la marca Gabriel Celaya representa un acontecimiento totalmente singular en la historia de nuestra literatura: no es un seudónimo, es decir, la adopción utilitaria de otro nombre; ni un heterónimo, es decir, la fingida y literaria adopción de una nueva identidad. No, Gabriel Celaya representó en la vida de Múgica algo mucho más grande, algo distinto: la aparición de un hombre nuevo, y no ya en los papeles sino en la estricta realidad.
'Creó' a Gabriel Celaya
La responsabilidad de la creación de ese hombre nuevo corresponde a Maritxu Gastón. Quizás también por eso su papel difiere un tanto del de eterna acompañante de un escritor. A ella le corresponde un lugar fundacional en la vida de Celaya; es el núcleo que alumbró a un hombre diferente y lo ganó para la literatura.
El cínico mundo de las relaciones literarias está lleno de damas avispadas que embarrancan en las costas de un poeta y operan en sus aledaños como una codiciosa turba de vikingos. Son tantos y tan conocidos los nombres que no merecen particular recordación. Muchos de ellos ni siquiera merecen la estraza del periódico sino el couché que circula por las peluquerías. Pero el caso de Amparitxu no es, desde luego, uno de ellos. Ella no llegó en busca del expolio, ni se acercó a un poeta demenciado tentando sin recato un golpe de estado notarial. Se acercó, muchos años antes, a un hombre, y extrajo el poeta que llevaba dentro. Lo construyó ella misma, lo condujo a lo largo de los años, lo cobijó mientras escribía el verso eterno.
Ayer se fue la mujer que logró todo eso. Y con ella se va también buena parte de una época en que la poesía, que nunca ha sido necesaria, consiguió parecerlo un poco.
OBITUARIO: 'IN MEMÓRIAM'
Amparitxu Gastón, la mujer que inventó a un hombre
Cuando ya nada se espera personalmente exaltante,
mas se palpita y se sigue más acá de la conciencia,
fieramente existiendo, ciegamente afirmado,
como un pulso que golpea las tinieblas,
cuando se miran de frente
los vertiginosos ojos claros de la muerte,
se dicen las verdades:
las bárbaras, terribles, amorosas crueldades.
Se dicen los poemas
que ensanchan los pulmones de cuantos, asfixiados,
piden ser, piden ritmo,
piden ley para aquello que sienten excesivo.
Con la velocidad del instinto,
con el rayo del prodigio,
como mágica evidencia, lo real se nos convierte
en lo idéntico a sí mismo.
Poesía para el pobre, poesía necesaria
como el pan de cada día,
como el aire que exigimos trece veces por minuto,
para ser y en tanto somos dar un sí que glorifica.
Porque vivimos a golpes, porque apenas si nos dejan
decir que somos quien somos,
nuestros cantares no pueden ser sin pecado un adorno.
Estamos tocando el fondo.
Maldigo la poesía concebida como un lujo
cultural por los neutrales
que, lavándose las manos, se desentienden y evaden.
Maldigo la poesía de quien no toma partido hasta mancharse.
Hago mías las faltas. Siento en mí a cuantos sufren
y canto respirando.
Canto, y canto, y cantando más allá de mis penas
personales, me ensancho.
Quisiera daros vida, provocar nuevos actos,
y calculo por eso con técnica qué puedo.
Me siento un ingeniero del verso y un obrero
que trabaja con otros a España en sus aceros.
Tal es mi poesía: poesía-herramienta
a la vez que latido de lo unánime y ciego.
Tal es, arma cargada de futuro expansivo
con que te apunto al pecho.
No es una poesía gota a gota pensada.
No es un bello producto. No es un fruto perfecto.
Es algo como el aire que todos respiramos
y es el canto que espacia cuanto dentro llevamos.
Son palabras que todos repetimos sintiendo
como nuestras, y vuelan. Son más que lo mentado.
Son lo más necesario: lo que no tiene nombre.
Son gritos en el cielo, y en la tierra son actos.
sábado, 7 de noviembre de 2009
Se deja de querer
Se deja de querer, y no se sabe
por qué se deja de querer.
Es como abrir la mano y encontrarla vacía,
y no saber, de pronto, qué cosa se nos fue.
Se deja de querer, y es como un río
cuya corriente fresca ya no calma la sed;
como andar en otoño sobre las hojas secas,
y pisar la hoja verde que no debió caer.
Se deja de querer, y es como el ciego
que aún dice adiós, llorando, después que pasó el tren;
o como quien despierta recordando un camino,
pero ya sólo sabe que regresó por él.
Se deja de querer, como quien deja
de andar por una calle, sin razón, sin saber;
y es hallar un diamante brillando en el rocío,
y que, ya al recogerlo, se evapore también.
Se deja de querer, y es como un viaje
detenido en la sombra, sin seguir ni volver;
y es cortar una rosa para adornar la mesa
y que el viento deshoje la rosa en el mantel.
Se deja de querer, y es como un niño
que ve cómo naufragan sus barcos de papel;
o escribir en la arena la fecha de mañana
y que el mar se la lleve con el nombre de ayer.
Se deja de querer, y es como un libro
que, aun abierto hoja a hoja, quedó a medio leer;
y es como la sortija que se quitó del dedo,
y sólo así supimos que se marcó en la piel.
Se deja de querer, y no se sabe
por qué se deja de querer...
José Ángel Buesa
por qué se deja de querer.
Es como abrir la mano y encontrarla vacía,
y no saber, de pronto, qué cosa se nos fue.
Se deja de querer, y es como un río
cuya corriente fresca ya no calma la sed;
como andar en otoño sobre las hojas secas,
y pisar la hoja verde que no debió caer.
Se deja de querer, y es como el ciego
que aún dice adiós, llorando, después que pasó el tren;
o como quien despierta recordando un camino,
pero ya sólo sabe que regresó por él.
Se deja de querer, como quien deja
de andar por una calle, sin razón, sin saber;
y es hallar un diamante brillando en el rocío,
y que, ya al recogerlo, se evapore también.
Se deja de querer, y es como un viaje
detenido en la sombra, sin seguir ni volver;
y es cortar una rosa para adornar la mesa
y que el viento deshoje la rosa en el mantel.
Se deja de querer, y es como un niño
que ve cómo naufragan sus barcos de papel;
o escribir en la arena la fecha de mañana
y que el mar se la lleve con el nombre de ayer.
Se deja de querer, y es como un libro
que, aun abierto hoja a hoja, quedó a medio leer;
y es como la sortija que se quitó del dedo,
y sólo así supimos que se marcó en la piel.
Se deja de querer, y no se sabe
por qué se deja de querer...
José Ángel Buesa
jueves, 5 de noviembre de 2009
Regala memoria
domingo, 25 de octubre de 2009
Nuestra huella ecológica
Sería el área biológicamente productiva que se necesitaría para suministrarnos recursos y absorber los desechos que producimos, calculada en el caso de que todos los habitantes de la Tierra viviesen igual que nosotros. A mí me sale que se necesitarían 2,3 planetas...
Si queréis calcular la vuestra, resulta curioso:
http://earthday.net/footprint/flash.html
Si queréis calcular la vuestra, resulta curioso:
http://earthday.net/footprint/flash.html
León
El león ya no es lo que era, va camino de ser un lince o un elefante...
http://animals.nationalgeographic.com/lion-decline-map/
http://animals.nationalgeographic.com/lion-decline-map/
sábado, 17 de octubre de 2009
domingo, 11 de octubre de 2009
Danzas para corazones endurecidos
Elegantísima y preciosa danza de Mongolia. Direis que busco cosas raras pero me gusta conocer de todo y esto que me he encontrado es una auténtica sorpresa con indudable relación con la danza china.
http://www.youtube.com/watch?v=YiTh0YFtzqs&feature=related
http://www.youtube.com/watch?v=YiTh0YFtzqs&feature=related
lunes, 5 de octubre de 2009
Singur Ros
Una música extraña, enigmática, no exenta de atractivo, sobre todo la voz en esta canción, la visión hipnótica de esos árboles entre la niebla.
No existe el idioma en el que cantan, es un derivado del islandés. Es un grupo que ha vendido dos millones de copias de sus discos, algo tendrán.
http://www.youtube.com/watch?v=bA4B7-d691M&feature=related
No existe el idioma en el que cantan, es un derivado del islandés. Es un grupo que ha vendido dos millones de copias de sus discos, algo tendrán.
http://www.youtube.com/watch?v=bA4B7-d691M&feature=related
domingo, 4 de octubre de 2009
ONGs
Hace poco ha circulado por la red un video obtenido en una reunión del Ayuntamiento de Tenerife, creo. La oposición había preguntado a cuántas ONGs se estaba ayudando desde la alcaldía. La concejala encargada de las ayudas sociales afirmó, leyendo un informe, que en el Ayuntamiento no constaba que existiese ninguna empresa llamada ONG. Se formó un alboroto de cuidado, incluso el alcalde se disculpó abochornado. La concejala se defendió de su ignorancia diciendo que le habían pasado ese informe y que el error era del funcionario que lo había redactado. Después se desdijo y entró en disculpas de que no había leído el informe previamente. El alcalde, que seguía con el bochorno, dijo que la concejala a partir de ahora se iba a leer los informes que le enviaran.
http://www.youtube.com/watch?v=tlqP6TGDKrY
http://www.youtube.com/watch?v=tlqP6TGDKrY
IG Nobel 2009
Concedidos los premios de este año a las investigaciones más inútiles y risibles:
Medicina veterinaria: para Catherine Douglas y Peter Rowlinson por conseguir demostrar que las vacas a las que se les pone nombre dan más leche que las vacas que no lo tienen.
Paz: este marchó para seis investigadores de la Universidad de Bern por determinar si es “mejor” que te peguen en la cabeza con una botella de cerveza vacía o llena.
Economía: a los principales bancos de Islandia por demostrar que es posible convertir rápidamente pequeños bancos en grandes entidades financieras y viceversa y que se puede hacer lo mismo con la economía de un país.
Química: aquí ganó la investigación de tres mexicanos de la Universidad Nacional Autónoma de México quienes consiguieron hacer diamantes de tequila.
Medicina: y éste sí que tiene mérito. Para Donald Unger por llevar 60 años haciéndose crujir los nudillos de su mano izquierda y nunca los de la derecha para probar si este hábito provocaba o no artritis.
Física: a los tres investigadores que analizaron por qué las embarazadas no se caen.
Literatura: otorgado a el servicio de policía de Irlanda por escribir más de 50 multas de tráfico (para ponerlas claro) a un hombre que se llama Prawo Jazdy, nombre que en polaco significa “permiso de conducir”.
Salud Pública: a Elena N. Bodnar, Rafael C. Lee y Sandra Marijan quienes crearon un sujetador el cual, en caso de emergencia, puede transformarse rápidamente en un par de máscaras, una para el dueño del sostén y la otra para alguien que la necesite.
Matemáticas: este recayó en Gideon Gono, Gobernador del Banco de la Reserva de Zimbabue, por proporcionarle a la población una forma simple para trabajar con un extenso rango de números todos los días al imprimir billetes cuyo valor varía entre un céntimo hasta 100 billones de dólares.
Biología: para tres investigadores japoneses que demostraron los desechos domésticos pueden ser “destruidos” en un 90% mediante el uso de bacterias extraídas de las heces de pandas gigantes.
Medicina veterinaria: para Catherine Douglas y Peter Rowlinson por conseguir demostrar que las vacas a las que se les pone nombre dan más leche que las vacas que no lo tienen.
Paz: este marchó para seis investigadores de la Universidad de Bern por determinar si es “mejor” que te peguen en la cabeza con una botella de cerveza vacía o llena.
Economía: a los principales bancos de Islandia por demostrar que es posible convertir rápidamente pequeños bancos en grandes entidades financieras y viceversa y que se puede hacer lo mismo con la economía de un país.
Química: aquí ganó la investigación de tres mexicanos de la Universidad Nacional Autónoma de México quienes consiguieron hacer diamantes de tequila.
Medicina: y éste sí que tiene mérito. Para Donald Unger por llevar 60 años haciéndose crujir los nudillos de su mano izquierda y nunca los de la derecha para probar si este hábito provocaba o no artritis.
Física: a los tres investigadores que analizaron por qué las embarazadas no se caen.
Literatura: otorgado a el servicio de policía de Irlanda por escribir más de 50 multas de tráfico (para ponerlas claro) a un hombre que se llama Prawo Jazdy, nombre que en polaco significa “permiso de conducir”.
Salud Pública: a Elena N. Bodnar, Rafael C. Lee y Sandra Marijan quienes crearon un sujetador el cual, en caso de emergencia, puede transformarse rápidamente en un par de máscaras, una para el dueño del sostén y la otra para alguien que la necesite.
Matemáticas: este recayó en Gideon Gono, Gobernador del Banco de la Reserva de Zimbabue, por proporcionarle a la población una forma simple para trabajar con un extenso rango de números todos los días al imprimir billetes cuyo valor varía entre un céntimo hasta 100 billones de dólares.
Biología: para tres investigadores japoneses que demostraron los desechos domésticos pueden ser “destruidos” en un 90% mediante el uso de bacterias extraídas de las heces de pandas gigantes.
viernes, 2 de octubre de 2009
Mercedes Sosa, que se va
Al parecer está ingresada en estado crítico, con un fallo multiorgánico. Mercedes forma parte de aquella juventud, cuando queríamos un mundo mejor y volvíamos la vista a esos cantores sudamericanos que luchaban, como Victor Jara, Violeta Parra, Silvio Rodríguez, la Nova Troba, Quilapayún y tantos otros que animaron a toda una generación joven en aquella España que nacía tras una profunda oscuridad.
http://www.youtube.com/watch?v=WyOJ-A5iv5I
http://www.youtube.com/watch?v=WyOJ-A5iv5I
miércoles, 23 de septiembre de 2009
El sueño del caracol
Es quizá algo largo este cortometraje salvo para personas desocupadas, como yo esta noche. Dura cerca de 14 minutos y narra una historia de amor sencilla y lineal, llena de matices sin embargo y con un final poco previsible. Es de Iván Sainz Pardo, de 2001, obtuvo numerosos premios internacionales, fue seleccionado para los Oscar de aquel año. Es difícil resistirse a la mirada de la protagonista, Julia Brendler, una actriz alemana desconocida en España.
http://www.youtube.com/watch?v=0iM1alyOR8w&feature=PlayList&p=1EF9ED552B1973CE&index=33
http://www.youtube.com/watch?v=0iM1alyOR8w&feature=PlayList&p=1EF9ED552B1973CE&index=33
martes, 22 de septiembre de 2009
Todo el pasado...
Todo el pasado se quiere apoderar de mí
y yo me quiero apoderar del futuro,
me dislocan la cabeza para que mire atrás
y yo quiero mirar adelante.
No me asustan la soledad y el silencio,
son los lugares preferidos de Dios
para manifestarse.
Mi eterna gratitud a los que me quieren,
siempre les recordaré a la hora del sol.
No puedo detenerme,
perdonad, tengo prisa,
soy un río de fuerza,
si me detengo moriré ahogada en mi propio remanso.
Gloria Fuertes
y yo me quiero apoderar del futuro,
me dislocan la cabeza para que mire atrás
y yo quiero mirar adelante.
No me asustan la soledad y el silencio,
son los lugares preferidos de Dios
para manifestarse.
Mi eterna gratitud a los que me quieren,
siempre les recordaré a la hora del sol.
No puedo detenerme,
perdonad, tengo prisa,
soy un río de fuerza,
si me detengo moriré ahogada en mi propio remanso.
Gloria Fuertes
lunes, 21 de septiembre de 2009
Haikus
Unos hermosos haikus para dar la bienvenida a la noche.
Si no dejo
rastro alguno
en este mundo fugaz,
¿qué podrías
reprocharme?
.............
Un rayo de eternidad
descubro en las hojas
caídas en mi jardín.
..............
Caed, pétalos del ciruelo,
caed. Y dejad el recuerdo
Del aroma.
Si no dejo
rastro alguno
en este mundo fugaz,
¿qué podrías
reprocharme?
.............
Un rayo de eternidad
descubro en las hojas
caídas en mi jardín.
..............
Caed, pétalos del ciruelo,
caed. Y dejad el recuerdo
Del aroma.
domingo, 20 de septiembre de 2009
Boa, dance coreano
Una de las cantantes más populares de Corea y Japón, 23 añitos y siete álbumes vendidos con gran éxito. La influencia de Madonna y Michael Jackson me parece notable en aquellas tierras. Puro ritmo "dance".
http://www.youtube.com/watch?v=75F0geJ3rKM&feature=fvw
http://www.youtube.com/watch?v=75F0geJ3rKM&feature=fvw
sábado, 19 de septiembre de 2009
Si un día juntásemos...
Si un día juntásemos todas las camas del mundo,
pero no sólo las de un pueblo, ni las de un país, sino todas,
todas las camas que hay en el mundo,
se montaría enseguida una gran guerra de almohadones:
la primera Guerra Mundial de Almohadones.
Lo bueno de las guerras de almohadones es que no hacen daño a nadie,
siempre que sean almohadones sin cremallera.
Y cuando se nos pasaran las ganas de jugar, cuando nos cansáramos,
podríamos ver que estamos rodeados de camas:
millones y millones de camas por todos los lados.
Entonces podríamos mirar, darnos cuenta
de que hay camas tan gordas como siete veces yo
y otras tan delgadas como un cartón.
Unas altas, altas como las de los antiguos cuentos
y otras bajas como debajo de un puente.
Las hay blandas como los brazos de una madre
y las hay que son duras como el suelo de tu calle.
Hay camas tan grandes en las que uno se pierde.
Y otras muy pequeñas en las que intentan dormir siete.
Algunas son calientes como la del abuelo.
Algunas son frías como las de un hospital.
Pero lo mejor, lo mejor de juntar todas las camas del mundo
sería que esa noche toda la gente del mundo podría dormir sobre una cama,
y descansar,
y soñar.
Soñar quizá con qué pasaría si un día juntáramos todas las cacerolas del mundo.
Autor Félix Albo. Editado en Palabras de Candil con álbum ilustrado por Marta Lanzón,
Autor Félix Albo. Editado en Palabras de Candil con álbum ilustrado por Marta Lanzón,
martes, 15 de septiembre de 2009
El hombre de hielo
Erase una vez un hombre de hielo. Pensaba que permanecería siempre así, convertido en una estatua en medio de una llanura que se perdía en el horizonte. Todo lo que veía era blanco. Blancas las ramas de los árboles, el suelo, los tejados de las casas lejanas. Blanco él mismo, cubierto de nieve, hecho de hielo. Pensaba que el mundo había nacido ayer, pobre estúpido, que todo lo que se veía era siempre así, blanco y uniforme.
Algunas personas que pasaban le miraban. Decía, ¿qué mirais?. ¿No habeis visto nunca un hombre de hielo?. Las niñas se reían cuando decía eso, tú eres de hielo, cantaban, tú eres de nada. De nada, de hielo, ¿qué más da?, se decía. Soy de hielo, es verdad, pero de hielo es también el paisaje y las nubes ahora que es invierno. De hielo son los sueños que puedo tener, de hielo el corazón que alguien me puso, no sé cuándo, no sé cómo, tampoco para qué. Y ahora miro mis manos y no siento nada con ellas, miro a lo lejos y no veo más que una llanura nevada y eso quizá sea el cielo o puede que el infierno.
Una noche nevó más de la cuenta y la nieve le llegaba a las axilas, no podía moverse. Se dijo, ¿cuánto me queda?. ¿Me queda una hora de vida? ¿Tal vez dos?. Quizá ya esté muerto y no lo sé, es posible que nunca haya existido, que yo mismo sea el sueño de un granjero, de una niña que ríe, de un hombre que camina, de un pájaro que vuela. Me llega la muerte ¿y qué he hecho?. No he llorado, no he sufrido, casi ni soñar he podido. Sólo ser de hielo, de hielo mis manos, de hielo mi vida entera. No sentía nada. Ni el frío. Ni hambre. Ni sueño. Ni angustia ni sufrimiento.
Con la mañana se alzó el Sol y era esplendoroso, como el hombre no había visto nunca. Se dijo, tal vez he muerto y éste sea el otro lado. Allá se encuentre un Sol que calienta. Tal vez esto sea el calor, este sentir mi interior crepitando, el agua que corre por mi piel de hielo.
Lentamente se derritió.
Luego corrió por el suelo en declive hasta terminar en un arroyo que crecía incontenible.
Agua de primavera, el Sol en el cielo, recuerdos de un hombre de hielo.
Algunas personas que pasaban le miraban. Decía, ¿qué mirais?. ¿No habeis visto nunca un hombre de hielo?. Las niñas se reían cuando decía eso, tú eres de hielo, cantaban, tú eres de nada. De nada, de hielo, ¿qué más da?, se decía. Soy de hielo, es verdad, pero de hielo es también el paisaje y las nubes ahora que es invierno. De hielo son los sueños que puedo tener, de hielo el corazón que alguien me puso, no sé cuándo, no sé cómo, tampoco para qué. Y ahora miro mis manos y no siento nada con ellas, miro a lo lejos y no veo más que una llanura nevada y eso quizá sea el cielo o puede que el infierno.
Una noche nevó más de la cuenta y la nieve le llegaba a las axilas, no podía moverse. Se dijo, ¿cuánto me queda?. ¿Me queda una hora de vida? ¿Tal vez dos?. Quizá ya esté muerto y no lo sé, es posible que nunca haya existido, que yo mismo sea el sueño de un granjero, de una niña que ríe, de un hombre que camina, de un pájaro que vuela. Me llega la muerte ¿y qué he hecho?. No he llorado, no he sufrido, casi ni soñar he podido. Sólo ser de hielo, de hielo mis manos, de hielo mi vida entera. No sentía nada. Ni el frío. Ni hambre. Ni sueño. Ni angustia ni sufrimiento.
Con la mañana se alzó el Sol y era esplendoroso, como el hombre no había visto nunca. Se dijo, tal vez he muerto y éste sea el otro lado. Allá se encuentre un Sol que calienta. Tal vez esto sea el calor, este sentir mi interior crepitando, el agua que corre por mi piel de hielo.
Lentamente se derritió.
Luego corrió por el suelo en declive hasta terminar en un arroyo que crecía incontenible.
Agua de primavera, el Sol en el cielo, recuerdos de un hombre de hielo.
jueves, 10 de septiembre de 2009
El Dragón de Wei
Aquella noche, en la hora de la rata, el emperador soñó que había salido de su palacio y que en la oscuridad caminaba por el jardín, bajo los árboles en flor. Algo se arrodilló a sus pies y le pidió amparo. El emperador accedió; el suplicante dijo que era un dragón y que los astros le habían revelado que al día siguiente, antes de la caída de la noche, Wei Cheng, ministro del emperador, le cortaría la cabeza. En el sueño, el emperador juró protegerlo.
Al despertarse, el emperador preguntó por Wei Cheng. Le dijeron que no estaba en el palacio; el emperador lo mandó buscar y lo tuvo atareado el día entero, para que no matara al dragón, y hacia el atardecer le propuso que jugaran al ajedrez. La partida era larga, el ministro estaba cansado y se quedó dormido.
Un estruendo conmovió la tierra. Poco después irrumpieron dos capitanes, que traían una inmensa cabeza de dragón empapada en sangre. La arrojaron a los pies del emperador y gritaron:
-¡Cayó del cielo!
Wei Cheng, que había despertado, la miró con perplejidad y observó:
-Qué raro, yo soñé que mataba a un dragón así.
Al despertarse, el emperador preguntó por Wei Cheng. Le dijeron que no estaba en el palacio; el emperador lo mandó buscar y lo tuvo atareado el día entero, para que no matara al dragón, y hacia el atardecer le propuso que jugaran al ajedrez. La partida era larga, el ministro estaba cansado y se quedó dormido.
Un estruendo conmovió la tierra. Poco después irrumpieron dos capitanes, que traían una inmensa cabeza de dragón empapada en sangre. La arrojaron a los pies del emperador y gritaron:
-¡Cayó del cielo!
Wei Cheng, que había despertado, la miró con perplejidad y observó:
-Qué raro, yo soñé que mataba a un dragón así.
Puedo deciros...
Puedo deciros...
Yo puedo deciros
que el carbón no mancha,
que el malo no es malo,
que el soldado nunca quiere ir,
que el olvido no existe,
que no hay muerte que mate.
Yo puedo deciros dónde está la Luz
la otra,
no ésta,
la luz donde crece la Armonía...
A veces me pregunto:
¿Hay cosa más fácil
que hacer un hombre de un criminal?
Nada tan sencillo
como comunicarnos sin teléfono.
Escribo para niños,
para peces,
para rameras honradas...
para ti.
A veces digo que la estrella es un clavel blanco,
pero eso no vale para nada.
Yo sé cuándo fallo y cuándo tengo razón.
Porque aún estoy viva
y tengo que manifestarme en la sombra,
porque hay hombres ¡que se beben la luz!
Gloria Fuertes
Yo puedo deciros
que el carbón no mancha,
que el malo no es malo,
que el soldado nunca quiere ir,
que el olvido no existe,
que no hay muerte que mate.
Yo puedo deciros dónde está la Luz
la otra,
no ésta,
la luz donde crece la Armonía...
A veces me pregunto:
¿Hay cosa más fácil
que hacer un hombre de un criminal?
Nada tan sencillo
como comunicarnos sin teléfono.
Escribo para niños,
para peces,
para rameras honradas...
para ti.
A veces digo que la estrella es un clavel blanco,
pero eso no vale para nada.
Yo sé cuándo fallo y cuándo tengo razón.
Porque aún estoy viva
y tengo que manifestarme en la sombra,
porque hay hombres ¡que se beben la luz!
Gloria Fuertes
sábado, 5 de septiembre de 2009
Y para después de las vacaciones
Y acabadas las vacaciones, hay que empezar poco a poco hasta tomar el ritmo necesario. Para eso, para retornar al mundo de una forma equilibrada, vamos a empezar con un poco de música de Cris Franke, hermosas imágenes acompañan este video y una música para escuchar de fondo y dulcificar el espíritu.
http://www.youtube.com/watch?v=GKbhf_1YnFI&feature=related
Y un precioso Adagio de Lara Fabian
http://www.youtube.com/watch?v=fcWsSj-xJJU&feature=fvw
http://www.youtube.com/watch?v=GKbhf_1YnFI&feature=related
Y un precioso Adagio de Lara Fabian
http://www.youtube.com/watch?v=fcWsSj-xJJU&feature=fvw
martes, 23 de junio de 2009
Un hombre que vuelve
En 1967, con tan solo 18 años, el cabo Richard Luttrell se topó con un joven soldado del NVA (Ejército regular de Vietnam del Norte) en mitad de la espesa jungla asiática. Tras un duelo de miradas y balazos la muerte decidió. Richard recogió de entre los efectos personales una pequeña fotografía del joven vietnamita con su hija que le acompañaría en su tormento obsesivo durante toda su vida. 33 años más tarde el compungido militar consigue reunirse con aquella niña para pedir perdón y devolverle la insólita foto. Esta es la historia.
http://www.youtube.com/watch?v=CWMM7fclV9k
http://www.youtube.com/watch?v=CWMM7fclV9k
miércoles, 10 de junio de 2009
Suo Gan
Tres versiones de esta preciosa nana irlandesa...
http://www.youtube.com/watch?v=g1-fdgV8SQw
http://www.youtube.com/watch?v=v-TMOFJ12qI&feature=related
http://www.youtube.com/watch?v=xK2R-596FZE
Duerme mi bebé, en mi pecho,
Son los brazos de una madre abrazándote.
Hazte un nido cómodo y calido .
Siente mi amor siempre nuevo.
El daño no te encontrará durante tu sueño,
El Dolor siempre pasará de largo
Niño amado, siempre serás,
En tu sueño apacible, con el seno materno cerca
Duerme en paz, duerme,
Oh duerme suavemente, que estampa
Veo una sonrisa en tu sueño profundo
¿Qué visiones te hacen tan feliz?
¿Están los ángeles sonriéndote en tu descanso lleno de paz?
¿Les devuelves la sonrisa, mientras duermes pacíficamente en el seno materno?
No temas el sonido, es la brisa
Barriendo hojas contra la puerta
No temas los mares murmurantes,
Olas solitarias llegando hasta la orilla
Duerme mi niño, no hay nada aquí
Mientras duermes en mi pecho
Los ángeles sonríen, no temasLos ángeles benditos guardan tu sueño
http://www.youtube.com/watch?v=g1-fdgV8SQw
http://www.youtube.com/watch?v=v-TMOFJ12qI&feature=related
http://www.youtube.com/watch?v=xK2R-596FZE
Duerme mi bebé, en mi pecho,
Son los brazos de una madre abrazándote.
Hazte un nido cómodo y calido .
Siente mi amor siempre nuevo.
El daño no te encontrará durante tu sueño,
El Dolor siempre pasará de largo
Niño amado, siempre serás,
En tu sueño apacible, con el seno materno cerca
Duerme en paz, duerme,
Oh duerme suavemente, que estampa
Veo una sonrisa en tu sueño profundo
¿Qué visiones te hacen tan feliz?
¿Están los ángeles sonriéndote en tu descanso lleno de paz?
¿Les devuelves la sonrisa, mientras duermes pacíficamente en el seno materno?
No temas el sonido, es la brisa
Barriendo hojas contra la puerta
No temas los mares murmurantes,
Olas solitarias llegando hasta la orilla
Duerme mi niño, no hay nada aquí
Mientras duermes en mi pecho
Los ángeles sonríen, no temasLos ángeles benditos guardan tu sueño
miércoles, 27 de mayo de 2009
Blanca Sandino In Memoriam
Nunca llegué a conocer personalmente a esta mujer. Pero su poesía siempre me pareció cercana y de una gran calidad. Espero que allá donde esté que su poesía siempre le acompañe.
Insomnio airado
Tengo un airado y estremecedor insomnio entre las manos;
y junto a él, apilo las tristes cicatrices de otras noches:
los sueños no soñados, los besos no besados,
los pensamientos torpes que nunca deseé.
Longitudes inmensas; níveos sudarios de dudosos desiertos.
Ansias tan irritadas como airadas, deseos y nostalgias,
-insomnes unos y otros-, reconquistan mi cama.
¿Los ves? Son mis propios y aciagos penitentes, almas en pena
que, por ella, -calle Mayor arriba, calle Mayor abajo-,
pasean una sacrílega procesión de desencantos,
y de ansias perdidas, y enredadas, en las aristas del mísero cristal,
-pues no es espejo-, de cada noche en vela que me tocó vivir.
Blanca Sandino Iglesias
Insomnio airado
Tengo un airado y estremecedor insomnio entre las manos;
y junto a él, apilo las tristes cicatrices de otras noches:
los sueños no soñados, los besos no besados,
los pensamientos torpes que nunca deseé.
Longitudes inmensas; níveos sudarios de dudosos desiertos.
Ansias tan irritadas como airadas, deseos y nostalgias,
-insomnes unos y otros-, reconquistan mi cama.
¿Los ves? Son mis propios y aciagos penitentes, almas en pena
que, por ella, -calle Mayor arriba, calle Mayor abajo-,
pasean una sacrílega procesión de desencantos,
y de ansias perdidas, y enredadas, en las aristas del mísero cristal,
-pues no es espejo-, de cada noche en vela que me tocó vivir.
Blanca Sandino Iglesias
domingo, 24 de mayo de 2009
Para hacer una buena paella
Que no se diga que aquí no hablamos de cocina. Una receta musical e instructiva...
http://www.youtube.com/watch?v=1V7IHvD7rKU
http://www.youtube.com/watch?v=1V7IHvD7rKU
The Classic
Hay una película coreana: "The Classic", una historia probablemente lacrimógena de una chica que se enamora de uno que va a la guerra de Vietnam y entonces el chico muere pero ella se encuentra con el hermano del muerto y piensa que a rey muerto, rey puesto. Algo así debe ser. Total, que el tema central, cantado por el conocidísimo Han Sung Min, es éste, suena bien, en plan romántico:
http://www.youtube.com/watch?v=q0u-aZJxAo0&feature=related
http://www.youtube.com/watch?v=q0u-aZJxAo0&feature=related
lunes, 18 de mayo de 2009
Benedetti
Descanse en paz.
Chau número tres (Mario Benedetti)
Te dejo con tu vida
tu trabajo
tu gente
con tus puestas de sol
y tus amaneceres
sembrando tu confianza
te dejo junto al mundo
derrotando imposibles
segura sin seguro
te dejo frente al mar
descifrándote sola
sin mi pregunta a ciegas
sin mi respuesta rota
te dejo sin mis dudas
pobres y malheridas
sin mis inmadureces
sin mi veteranía
pero tampoco creas
a pie juntillas todo
no creas nunca creas
este falso abandono
estaré donde menos
lo esperes
por ejemplo
en un árbol añoso
de oscuros cabeceos
estaré en un lejano
horizonte sin horas
en la huella del tacto
en tu sombra y mi sombra
estaré repartido
en cuatro o cinco pibes
de esos que vos mirás
y enseguida te siguen
y ojalá pueda estar
de tu sueño en la red
esperando tus ojos
y mirandoté.
Chau número tres (Mario Benedetti)
Te dejo con tu vida
tu trabajo
tu gente
con tus puestas de sol
y tus amaneceres
sembrando tu confianza
te dejo junto al mundo
derrotando imposibles
segura sin seguro
te dejo frente al mar
descifrándote sola
sin mi pregunta a ciegas
sin mi respuesta rota
te dejo sin mis dudas
pobres y malheridas
sin mis inmadureces
sin mi veteranía
pero tampoco creas
a pie juntillas todo
no creas nunca creas
este falso abandono
estaré donde menos
lo esperes
por ejemplo
en un árbol añoso
de oscuros cabeceos
estaré en un lejano
horizonte sin horas
en la huella del tacto
en tu sombra y mi sombra
estaré repartido
en cuatro o cinco pibes
de esos que vos mirás
y enseguida te siguen
y ojalá pueda estar
de tu sueño en la red
esperando tus ojos
y mirandoté.
viernes, 15 de mayo de 2009
Para no perder los puntos
Nos "advierten" de no sé cuántos controles de velocidad en vías secundarias para lo que queda de mayo. A esta conductora la querían multar pero no había manera de que se dejara.
http://www.youtube.com/watch?v=837tUNS6ix0&feature=related
http://www.youtube.com/watch?v=837tUNS6ix0&feature=related
domingo, 10 de mayo de 2009
Esa bonita escena de la película "Cría cuervos", de Saura, con una canción bien conocida de Jeanette.
http://www.youtube.com/watch?v=OzrGFvI2hS0
Hoy en mi ventana brilla el sol
y un corazon
se pone triste contemplando la ciudad
por que te vas
como cada noche desperte
pensando en ti
y en mi reloj todas las horas vi pasar
por que te vas
todas las promesas de mi amor se iran contigo
me olvidaras, me olvidaras
junto a la estacion yo llorare igual que un niño
por que te vas, por que te vaaas
bajo la penunbra de un farol
se dormiran
todas las cosas que quedaron por decir
se dormiran
junto a las manillas de un reloj
esperaran
todas las horas que quedaron por vivir
espararan
todas las promesas de mi amor se iran contigo
me olvidaras, me olvidaras
junto a la estacion yo llorare igual que un niño
por que te vas, porque te vaaaaaaaas
http://www.youtube.com/watch?v=OzrGFvI2hS0
Hoy en mi ventana brilla el sol
y un corazon
se pone triste contemplando la ciudad
por que te vas
como cada noche desperte
pensando en ti
y en mi reloj todas las horas vi pasar
por que te vas
todas las promesas de mi amor se iran contigo
me olvidaras, me olvidaras
junto a la estacion yo llorare igual que un niño
por que te vas, por que te vaaas
bajo la penunbra de un farol
se dormiran
todas las cosas que quedaron por decir
se dormiran
junto a las manillas de un reloj
esperaran
todas las horas que quedaron por vivir
espararan
todas las promesas de mi amor se iran contigo
me olvidaras, me olvidaras
junto a la estacion yo llorare igual que un niño
por que te vas, porque te vaaaaaaaas
miércoles, 6 de mayo de 2009
Para los ususarios de internet, móvil, teléfono y en general para todos, existe una interesante página para orientar en cualquier reclamación por estos servicios de Telecomunicaciones (el 85 % de las reclamaciones se resuelven favorablemente al cliente):
http://www.usuariosteleco.es/
http://www.usuariosteleco.es/
lunes, 30 de marzo de 2009
La calle (Rafael Morales)
LA CALLE
Y ya estás en la calle, prisionero
en un mundo de voces y de ruidos,
en un mundo de sueños confundidos
en un fiero murmullo de avispero.
Una malla de penas y de acero,
de motores, de risas y de olvidos,
de pasiones oscuras y sentidos
teje un furtivo, impávido hilandero.
Caminas entre fieras dentelladas,
entres máscaras acres y colmillos,
entre cruentas tormentas disfrazadas,
entre zapatos de fugaces brillos
que sostienen al aire levantadas
feroces procesiones de cuchillos.
Está ahora en medio de la calle,
en medio de los otros, tus hermanos,
en un gran hervidero de caínes,
en un gran río de apagado llanto.
Pero estás solo, solo entre los otros
como en el bosque solo se halla el árbol.
Solo contigo, con tus sueños solo,
con tu egoísmo solo entre los brazos,
caminas hacia nadie y siempre pasas
como un viento invisible sobre el páramo.
Ellos también van solos. Todos hacia
la soledad más pura caminamos.
Rafael Morales (La máscara y los dientes)
Y ya estás en la calle, prisionero
en un mundo de voces y de ruidos,
en un mundo de sueños confundidos
en un fiero murmullo de avispero.
Una malla de penas y de acero,
de motores, de risas y de olvidos,
de pasiones oscuras y sentidos
teje un furtivo, impávido hilandero.
Caminas entre fieras dentelladas,
entres máscaras acres y colmillos,
entre cruentas tormentas disfrazadas,
entre zapatos de fugaces brillos
que sostienen al aire levantadas
feroces procesiones de cuchillos.
Está ahora en medio de la calle,
en medio de los otros, tus hermanos,
en un gran hervidero de caínes,
en un gran río de apagado llanto.
Pero estás solo, solo entre los otros
como en el bosque solo se halla el árbol.
Solo contigo, con tus sueños solo,
con tu egoísmo solo entre los brazos,
caminas hacia nadie y siempre pasas
como un viento invisible sobre el páramo.
Ellos también van solos. Todos hacia
la soledad más pura caminamos.
Rafael Morales (La máscara y los dientes)
Suscribirse a:
Entradas (Atom)