miércoles, 31 de diciembre de 2014

Que seas feliz en el 2015

QUE SEAS FELIZ

Te deseo primero que ames, y que amando, también seas amado. Y que, de no ser así, seas breve en olvidar y que después de olvidar, no guardes rencores. Deseo, pues, que no sea así, pero que si es, sepas ser sin desesperar. Te deseo también que tengas amigos, y que, incluso malos e inconsecuentes, sean valientes y fieles, y que por lo menos haya uno en quien puedas confiar sin dudar.
Y porque la vida es así, te deseo también que tengas enemigos. Ni muchos ni pocos, en la medida exacta, para que algunas veces, te cuestiones tus propias certezas. Y que entre ellos, haya por lo menos uno que sea justo, para que no te sientas demasiado seguro. Te deseo además, que seas útil, mas no insustituible. Y que en los momentos malos, cuando no quede mas nada, esa utilidad sea suficiente para mantenerte en pie. Igualmente, te deseo que seas tolerante: no con los que se equivocan poco, porque eso es fácil, sino con los que se equivocan mucho e irremediablemente, y que haciendo buen uso de esa tolerancia, sirvas de ejemplo a otros.
Te deseo que siendo joven no madures demasiado de prisa, y que ya maduro, no insistas en rejuvenecer, y que siendo viejo no te dediques al desespero. Porque cada edad tiene su placer y su dolor y es necesario dejar que fluyan entre nosotros. Te deseo de paso que seas triste. No todo el año, sino apenas un día. Pero que en ese día descubras que la risa diaria es buena, que la risa habitual es sosa y la risa constante es malsana.
Te deseo que descubras, con urgencia máxima, por encima y a pesar de todo, que existen, y que te rodean seres oprimidos, tratados con injusticia y personas infelices.
Te deseo que acaricies un gato, alimentes a un pájaro y oigas a un jilguero erguir triunfante su canto matinal, porque de esta manera, te sentirás bien por nada. Deseo también que plantes una semilla, por mas minúscula que sea, y la acompañes en su crecimiento, para que descubras de cuántas vidas está hecho un árbol.
Te deseo, además, que tengas dinero, porque es necesario ser práctico. Y que por lo menos una vez por año pongas algo de ese dinero frente a ti y digas: "Esto es mío", solo para que quede claro quién es el dueño de quien.
Te deseo también que ninguno de tus afectos muera, pero que si muere alguno, puedas llorar sin lamentarte y sufrir sin sentirte culpable.
Te deseo por fin que, siendo hombre, tengas una buena mujer, y que siendo mujer, tengas un buen hombre, mañana y al día siguiente, y que cuando estén exhaustos y sonrientes, hablen sobre el amor para recomenzar. "Si todas estas cosas llegaran a pasar, no tengo mas nada que desearte, sino que seas feliz".


sábado, 27 de diciembre de 2014


Esta poesía la escribí hace años en memoria de mi amiga, Teresa,, que ahora mismo debe de estar a la diestra del padre contándole historias de sus preciosas Islas Canarias, porque si no está allí es que no existe cielo. Nunca olvidaré su ánimo cuando murió mi madre, así que una parte de ella debe de estar con Dios y otra parte sobrevive en mi corazón. Nunca te olvidaré, Tere...


Me llevaré del mundo sólo eso:
la imagen de un balcón
con la ropa tendida y algunas flores rojas.
Os quedará,
el gesto de los gatos,
el deseo y abril,
unas calles que sueñan
con las calles hermanas
de ciudades de par en par abiertas
a las raíces viejas de la luz.
Me llevaré del mundo sólo eso,
sólo eso,
para que todo, como un eco
ya muy poco creíble,
quede reverberando,
reverberando hasta apagarse
como el mar
en el lomo incitante de los barcos.
Y que se acabe así:
una canción silbada
que se aprendió en un sueño,
una canción silbada
hasta el silencio.




martes, 23 de diciembre de 2014

Nació el niño y la amoma le canta al anochecer:

El niño bonito está en la cuna
muy calentito, entre sábanas blancas

...
La abuela le dice: niño bonito,
duérmete, duérmete.

Si no te duermes,
vendrá un perro grande.

Por eso, mi niño precioso,
pronto, duerme, duérmete.


Acompaña al Orfeón la Orquesta Reino de Aragón

domingo, 21 de diciembre de 2014

ROMANCE DE ROSAFRESCA


Hace mucho que no comparto una de mis aficiones más constantes. el Romancero viejo.

    ROMANCE DE ROSAFRESCA
    Rosafresca, Rosafresca, tan garrida y con amor, ...
    cuando yo os tuve en mis brazos no vos supe servir, no,
    y ahora que os serviría no vos puedo haber, no.
    —Vuestra fue la culpa, amigo, vuestra fue, que mía no:
    enviásteme una carta con un vuestro servidor
    y en lugar de recaudar él dijera otra razón:
    que érades casado, amigo, allá en tierra de León,
    que tenéis mujer hermosa y hijos como una flor.
    —Quien vos lo dijo, señora, no vos dijo verdad, no,
    que yo nunca entré en Castilla ni allá en tierras de León,
    sino cuando era pequeño que no sabía de amor.

martes, 16 de diciembre de 2014

Jarramplas

Durante los días 19 y 20 de enero, un hombre representando a Jarramplas, hace un recorrido por la calles de Piornal (Cáceres) tocando un tamboril, a la vez que los vecinos en forma de castigo, porque antiguamente a Jarramplas se le veía como un ladrón de ganado, le tiran verduras y hortalizas. Eso hace que el representante lleve una malla metálica bajo el vestido. Actuar como Jarramplas es un auténtico honor en aquel pueblo.
Mi grupo folclórico favorito interpreta una canción dedicada a tan popular personaje.

lunes, 15 de diciembre de 2014

El mar, sólo el mar



Abrió la ventana con la vana esperanza de ver el mar, oler su salitre y
cegarse con la fuerza de sol sobre la arena de la playa en una tarde de verano.
Sólo se encontró una pared y una ventana donde ondeaba al viento cual
vela de palo mayor una vieja sabana tendida al viento. Oyó a su madre
 gritarle desde el fondo de la casa. Cerró la ventana y volvió a soñar con
 el mar, sólo el mar.      

domingo, 14 de diciembre de 2014

Hasta luego Maestro Joan Barril

Joan Barril era un periodista que tenía la mejor facultad que se debería tener en esta vida para ser periodista, que es la de ser una buena persona. Pero no sólo era  un buen periodista, Joan Barril era un cuenta cuentos, un escritor, un filósofo de la vida y sin duda un verdadero ciudadano del universo. Él ha sido el único que ha conseguido que empezara un periódico por la contraportada, que me interesara más el final de un diario que las noticias de su  portada, que lo primero que quería de ese periódico fuese leer su artículo que publicaban al final, en la última página, un final que era como una dulce despedida a la espera de un nuevo día, de un nuevo diario. No creo que nunca más ningún periodista consiga tal hazaña, que consiga que las noticias pasen a un segundo plano. El maestro Joan Barril nos ha dejado, fuimos afortunados los que pudimos escuchar sus palabras o leer sus relatos. Hasta luego Maestro Joan Barril.  


Os contaré un cuento. Hace muchos años, cuando el petróleo estaba
más asociado a las estufas que a las invasiones, la gente solía 
reunirse cerca del hogar y de allí salían múltiples historias vividas 
quizás sólo contadas. Las sombras de los asistentes se proyectaban
sobre las paredes de la casa o del bosque y al acabar, cada uno de
ellos se llevaba un trozo de cuento para ponerlo bajo la almohada y
hacer que nuevas imaginaciones salieran por la ventana hacia un
mundo posible. Para eso sirven los cuentos: para dejarlos fundir en
la boca como los caramelos y para creer que podemos estar allí 
donde nunca podremos ir.
Pero un buen día llegó la televisión a la sala de estar y los cuenta
cuentos se quedaron sin parroquia. El cuento salía de la máquina
y la imaginación ya no tenía trabajo porque en lugar de dejar que el
caramelo se fundiera en la boca nos lo daban masticado. Pero la 
necesidad de recibir cuentos para ser soñados continuó”




viernes, 12 de diciembre de 2014

Palmones (Los Barrios, Cádiz)

Palmones (Los Barrios, Cádiz) fue en sus orígenes un pueblo pescador. Hoy en día aparece rodeado de industrias y sus marismas, aunque a veces sufran las consecuencias de los vertidos que inundan la bahía, siguen reclamando el derecho a la vida. Como esas gaviotas y patos que alegran la vista al visitante, o esa Concha escorada que parece soñar con otros tiempos...




jueves, 11 de diciembre de 2014

Marina Romero

A todos los que al mirar
véis algo,
os saludo.
A todos los que al nacer
lleváis yerba buena en la boca
os saludo.
Y a los que os dejásteis
la hiel
en la tórtola,
la carne
en la garra del buitre,
el musgo
en el hueco del árbol,
y la moneda
en el bolsillo ajeno
os saludo.

Bienvenidos
a este valle de lágrimas.

Y cuidad que la sal
no os amargue
alguna noche,
y para siempre,
los labios.


          
Marina Romero



domingo, 7 de diciembre de 2014

Haremos camino

HAREMOS CAMINO

(Dedicada a Ramón Sampedro)

Haremos camino
con la prisa de las hora cautas,
cuando el sol suda de valiente.

Haremos camino
por andurriales poco transitados
buscando nuevas conversaciones,
y no nos detendrá nunca
ni el calor ni el frio
porque llevamos el habla,
la lección aprendido de los viejos,
el compromiso cruento de seguir
superando palos en las ruedas.
Un día todos abriremos la puerta

y miraremos el horizonte del triunfo.


sábado, 6 de diciembre de 2014

Tatuaje

Antes de que la copla española declinara con el franquismo, hubo una canción que cantaban a voz en cuello las mujeres de principios de los 40, las que hacían cola con una cartilla de racionamiento, las que trabajaban en fábricas de costura, sobre todo las mujeres de los vencidos en la reciente guerra.
Es una copla que habla de una prostituta, de un amor apasionado por un extranjero que algún día volverá, muy al estilo de "Ojos verdes". Se han hecho estudios para averiguar qué... había en aquella canción de transgresión frente a una realidad terrible de miseria y represión, por qué la hicieron suya tantas mujeres, por qué la cantaban con pasión.

Dice Martín Gaite: “Aquello era contar una historia de verdad”. Y también recuerda, “Una pasión como aquella nos estaba vedada a las chicas sensatas y decentes de la nueva España”. “Tatuaje,” para ella, significaba volver a sentir plenamente, frente a la represión de los sentimientos imperante. Manuel Vázquez Montalbán interpreta esta copla como una canción de protesta de las mujeres contra la vida que consistía en hacer colas constantemente con la cartilla de racionamiento en la mano. Recuerda que “la cantaban con toda el alma aquellas mujeres de los años 40”. ¿Por qué ese enorme impacto? ¿Qué estaban expresando los vencidos cuando cantaban “Tatuaje” con toda el alma? ¿Qué decían a través de esta canción que no podían decir de otra manera?

Atentos a la letra.

martes, 2 de diciembre de 2014

 De una novela que ando leyendo:

"Somos personas atemorizadas, indefensas. Nos asusta sentirnos desprotegidos, amenazados. Tenemos miedo a la violencia, la muerte, la falta de sentido en nuestra vida. Por eso acudimos a Dios, a explicaciones que nos dejan insatisfechos, a Estados que nos protejan, grupos humanos a los que decimos pertenecer y en los que nos sumergimos diciendo que ganamos identidad, cuando la estamos perdiendo. Pequeños seres asustados, destinados a morir y pasar, que no desean asumir el carácter efímero de la vida, la transitoriedad de todas las pasiones, las ambiciones y los sueños".

Es un libro antiguo, raro de encontrar. "Novela de mi vida", de Carolina Mayoral.

lunes, 1 de diciembre de 2014

El pino, de Dionisio Ridruejo


Pino esbelto y tranquilo,
soledad de la tarde,
tan concreto en la libre...
desolación del aire,
tan alto cuando todo
se confunde y abate
y huye el sol a tu copa
tibio y agonizante.
Cómo me fortalece
la paz de tu combate,
ascensión sin fatiga,
raíz honda y constante.
Tu majestad envuelve
el cielo sin celaje
y en tu recio sosiego
la tierra se complace.
Mis ojos educados
en tu sediento mástil
ascienden y divisan
la soledad más ágil,
mientras sueña el silencio
sin astros y sin aves
como el solo decoro
de tu verde ramaje.
Pino esbelto y tranquilo,
tu soledad te guarde,
y consagre la mía
desunida y errante,
segada de su tierra,
extraña de su aire,
cuando aún es oro virgen
la cumbre de la tarde
y tú clamas e invocas
el tiempo de mi carne
y otro vuelo sin tiempo
que se sueña y se hace.                                                                                                                                                                                                                                                                                    

jueves, 27 de noviembre de 2014

A menudo las apariencias engañan. Con más frecuencia de lo que pensamos. A veces creemos que llevamos la carretilla bien cargada y resulta que todo es humo y por eso no pesaba y no nos dábamos cuenta. Otras nos cuesta arrastrarla, es como si estuviera anclada al suelo y no nos importa o nos hacemos fuertes para tirar de ella con mucho amor. Amor del bueno, del que sirve para todo, para todos.
A veces las preguntas sin respuesta, los enigmas, el desconcierto ante las cosas importantes de la vida se colocan cómodamente en nuestro volquete y se revuelven inquietas. Algunas cosas suceden cuando te levantas de la cama y miras a lo lejos y te dices: ¡un día más y ya son tantos! ¡Gracias!

miércoles, 26 de noviembre de 2014

Hozan Yamamoto

Hozan Yamamoto fue un profundo renovador de la música tradicional japonesa en la segunda mitad del siglo XX. Armado de su flauta y alejándose del repertorio tradicional, la llevó a fundirse con el jazz. Aquí, en una pieza muy conocida.

domingo, 16 de noviembre de 2014

El camello amarrado

Bajo la calurosa luz del sol, una caravana atravesaba las arenas del desierto. Poco antes del atardecer se detuvieron para preparar el campamento donde iban a pernoctar. Un joven al que habían contratado para que se ocupara de los camellos se le acercó al jefe del grupo diciéndole:
- Tengo un problema, son 18 camellos y solo tengo 17 cuerdas para amarrarlos.
- Eso no es ningún problema – le dijo el jefe –, los camellos no son muy inteligente. Amarra los primeros 17 y luego te acercas al último y simulas amarrarlo a él también. Como habrá visto que todos sus compañeros fueron amarrados y habrá sentido que te acercaste a hacerle lo mismo, se quedará quieto toda la noche pensando que él también está atado.
El joven fue a hacer lo que le dijo el jefe sin protestar pero sin creer nada de lo que había escuchado. Al terminar se percató de que el último camello se quedó tranquilo junto a sus compañeros.
Al amanecer el joven vio con alivio que el camello permanecía allí donde lo había dejado. Entonces liberó a los otros 17 camellos ya que pronto debían partir. Cuando la caravana se puso en camino, el joven corrió hacia su jefe diciendo:
- Espere, espere, hay un camello que no nos sigue.
- ¿Es el mismo camello al que simulaste amarrar anoche? – contestó el jefe con una media sonrisa en los labios.
- Si ¿Cómo lo sabe?
- Seguro que esta mañana se te olvidó soltarlo
- Pero no tiene amarras
- Lo sé – contestó pacientemente el jefe –, pero el camello todavía piensa que está amarrado. Corre, simula soltarlo y verás que se pondrá en camino.
Lo mismo nos pasa a nosotros muchas veces. Nuestros prejuicios y paradigmas mentales nos colocan una atadura inexistente que no nos permite avanzar en nuestra vida, que nos amarra a creencias sin sentido y nos impide emprender la construcción de nuestros sueños y metas.



martes, 11 de noviembre de 2014

La gente tenía su gracia a la hora de hacer campaña allá por 1970 (humor negro incluido).


lunes, 10 de noviembre de 2014

Maestro del equilibrio

Resulta difícil de entender a la vez que sorprendente, ... pero Rocky Byun cuenta con la impresionante habilidad de equilibrar cualquier cosa en cualquier otro objeto ... y aunque lo puedas pensar ... no, ... no hay truco ...

viernes, 31 de octubre de 2014

Canción de cuna

Una canción que siempre me ha gustado. La "Canción de cuna" de Yunka Yamamoto.

jueves, 30 de octubre de 2014

Horizonte es una delgada línea, objeto de deseo de nuestros sueños. Si la cruzas, caes en el precipicio de la ambición; si te quedas a unos metros, sufres el trauma de la decepción.

martes, 28 de octubre de 2014

Romance del Conde Flores

Este conde Flores, sevillano, era algo pendón. Bonito romance de Joaquín Díaz.

lunes, 27 de octubre de 2014

El poeta galés Dylan Thomas

Hace exactamente un siglo, el poeta galés Dylan Thomas nacía en Swansea. Muerto cuando no había cumplido los cuarenta años, su obra sobrevive a pesar de que ya no goza del predicamento al que ayudó la leyenda de bebedor rebelde de su autor.


ESTE PAN QUE PARTO

Este pan que parto ayer fue avena,
este vino en un árbol extranjero
se sumergió en su fruto;
de día el hombre o por la noche el viento
abatieron la mies, rompieron la dicha de la uva.

Ayer en este vino de hoy, la sangre del verano
pujó en la carne que adornó la vid,
ayer en este pan
la avena estaba alegre bajo el viento;
el hombre rompió el sol, tiró el viento por tierra.

La carne que partís, la sangre que dejáis
ser desolación en las venas
fue la avena y la uva, nacidas
de la raíz sensual y de la savia.
De mi vino bebéis, partís mi pan.


jueves, 23 de octubre de 2014

El Descanso de la cuesta

De pequeño solía sentarme en una pronunciada cuesta de la carretera de mi pueblo, a la que no sé por qué llamaban la cuesta del francés. Veía subir aquellos Pegasos traqueteando despidiendo un humor infernal y entonces, algunos, vencidos por el peso de su carga, paraban con su ultima exhalación en un bar de carretera situado en lo más pendiente de la cuesta que se llamaba “El descanso de la cuesta”.

Allí pasé muchos días de verano, las mercancías tenían la facultad de hablarme y de decirme si iban o venían, si eran ladrillos para construir palacios o sacos de harina para hacer dulces pasteles. A aquellos poderosos Pegasos el tiempo los venció y los metió en el saco del olvido, y a los parroquianos del Descanso de la cuesta, una nueva y lejana autovía hace mucho tiempo que se los llevó. Ahora los nuevos y confortables camiones con los que hoy me cruzo por la carretera, parece que sus mercancías han perdido la facultad de hablar, callan, no dicen nada, si van o vienen, aunque a veces, casi con un sonido imperceptible, las escucho hablar de dinero, del valor que tienen en el mercado, de acciones de sus empresas, de que quieren ser rápidas y fugaces, correr y correr, sin parar, sin mirar atrás.

Ya hace muchos años que no subo la cuesta del francés, su cima se ha convertido en tierra de abandono y de olvido. Pero a veces me parece escuchar el eco del aquel bravo Pegaso, luchando, con su carga a cuestas, quizás buscando la eternidad…


Puedes tomarte un cortado en el Descanso de la cuesta,

pero la poesía es mucho más que eso.

Abre bien los ojos, si hace falta toma planta de bella mujer,

con una bella mujer que te recuerde

los cuentos inmortales de Xahrazad.

Te has perdido?  Yo te guiaré. Si me sigues

te mostraré las mil y una maravillas del olvido.


lunes, 20 de octubre de 2014

Bureaucratics

Bureaucratics es el titulo que le ha puesto el fotógrafo holandés Jan Banning a esta serie de fotografías – 68 – realizadas por todo el mundo en ocho países: Bolivia, China, Francia, Liberia, Rusia, Estados Unidos y Yemen, cincuenta de esas fotografías las ha reunido en un libro del mismo nombre. En las imágenes podemos ver todo tipo de funcionarios públicos situados detrás de sus correspondientes mesas, un magnífico retrato de servidores públicos en una gran variedad de condiciones.









domingo, 19 de octubre de 2014

Meditaciones

Al amanecer, dite a ti mismo: me voy a tropezar con un indiscreto, un desagradecido, un insolente, un envidioso, un insociable. Todo esto les sucede por su ignorancia del bien y del mal. Pero yo que he visto la naturaleza del bien, que es lo bello, y la del mal, que es lo vergonzoso, y la del mismo que comete la falta, que es de mi género, partícipe no de la misma sangre o semilla, sino de la mente y de una partícula divina, no puedo sufrir daño por obra de ninguno de ellos, pues ninguno me cubrirá de vergüenza; y no puedo enfadarme con un pariente ni odiarlo, porque hemos nacido para una tarea común, como los pies, como las manos, como los párpados, como las hileras de dientes superiores e inferiores. De modo que obrar unos contra otros va contra la naturaleza y es obrar negativamente enojarse y volverse de espaldas.
           Marco Aurelio. Meditaciones.




viernes, 17 de octubre de 2014

Los pájaros perdidos

    Música: Astor Piazzolla
    Letra: Mario Trejo

    ...
    Amo los pájaros perdidos
    que vuelven desde el más allá,
    a confundirse con un cielo
    que nunca más podre recuperar.

    Vuelven de nuevo los recuerdos,
    las horas jóvenes que di
    y desde el mar llega un fantasma
    hecho de cosas que amé y perdí.

    Todo fue un sueño, un sueño que perdimos,
    como perdimos los pájaros y el mar,
    un sueño breve y antiguo como el tiempo
    que los espejos no pueden reflejar.
    Después busqué perderte en tantas otras
    y aquella otra y todas eras vos;
    por fin logré reconocer cuando un adiós es un adiós,
    la soledad me devoró y fuimos dos.

    Vuelven los pájaros nocturnos
    que vuelan ciegos sobre el mar,
    la noche entera es un espejo
    que me devuelve tu soledad.

    Soy sólo un pájaro perdido
    que vuelve desde el más allá
    a confundirse con un cielo
    que nunca más podré recuperar.
                                                                                                                                                               

jueves, 16 de octubre de 2014

San Juan Palomo, ángel y mártir

Juan Palomo i Cadernera era un santo. Un verdadero santo, digno de ser venerado en un altar al lado de castos varones del antiguo y del nuevo testamento.

No es que él fuera célibe, no, Estaba casado, o sea, que tenía hijos, dos hijas para ser exactos, y mujer, como la mayoría de los mortales. Y la cosa que le hacia especialmente bueno, que le daba aquella aura de santidad, era precisamente su mujer, su costilla, su media naranja. O puede ser que tendríamos que decir el carácter de su consorte.

Que la Brigida era una mujer de carácter ninguno lo dudaba. Y que carácter! Fuerte, decidida, capaz de enfrentarse a un guardia civil de Roquetas a pecho descubierto (es un decir)... Todo al revés de nuestro Juan, que era tímido y apocado como un pajarillo, como una novicia, si es que las novicias de ahora lo son.

Naturalmente la señora Brigida llevaba los pantalones en su casa! Claro que esta expresión no tiene ningún sentido actualmente, porque esta pieza de ropa ha dejado de ser patrimonio de la masculinidad. Mejor tendríamos que decir que mandaba sobre su marido y sus hijas como un rey absolutista, como un déspota, como un arbitro de fútbol. Siempre a punto de sacar una tarjeta roja al pobre padre de familia, que era tratado como si fuese el equipo visitante, como si jugase siempre en campo contrario.

Por eso cuando la empresa del pobre hombre hizo fallida y se fue a quedar en el paro. Juan, a parte del disgusto normal de perder el trabajo, tuvo otro adicional: la perspectiva que se le presentaba de pasarse las 24 horas en casa, en compañía de aquel sargento de artillería que tenía por mujer.

Y si cuando llevaba un buen sueldo a casa ya era objeto de menosprecio y de burla, ahora que nada más tendría el subsidio tan escaso que le concedía el estado, ya se podía preparar!

- Inútil! Fracasado! - le decía continuamente la Brigida.

Y eso todavía lo podía soportar. Pero cuando empezó a tomar el improperio de moda, el sustantivo "perdedor", que salía tantas veces en la películas norteamericanas, Juan encontró que ya era demasiado. Que le dijeran insultos propios de su país, de su lengua, todavía lo podía aguantar. Pero que ella tuviese que ampliar su vocabulario con neologismos importados, eso ya pasaba de la raya!

- Basta! clamó como un anima en pena nuestro héroe. Decidme "vago", decidme "gandul", decidme...No sé! Decidme lo que queráis, pero no me digáis "perdedor"!

Y, dicho aquello, se retiró, temeroso de la reacción de la Furia que tenía delante.

La Brigida, que era alta y seca como una cigüeña, miró al pobre Juan como si fuese un gusano en el margen de una hoja, a punto de ser engullido.

- Al señor no le gusta que le digan "perdedor"! - exclamó poniendose las manos en la cintura, igual que si fuera a cantar una jota aragonesa .

Desde aquella infausta fecha, el epíteto "perdedor" acompañó la vida familiar del pobre Juan. "Perdedor" por aquí, "perdedor por allá... por cualquier motivo, por cualquier falta al rígido reglamento impuesto por la señora de la casa, salía el odiado insulto, el más detestado, el que encontraba más degradante, más insoportable.

Los dos ángeles engendrados por el nuevo parado, se agregaron a la letanía de la Brigida. No se lo decían para hacerle enfadar. Ellas, sus hijas lo dejaban caer de paso, como si fuese una cosa sabida:

- Tú, padre, como que eres un perdedor...

O bien, la más pequeña:

- Hoy en la escuela nos han preguntado el oficio de los padres. Y yo les he dicho que tu eres un perdedor. No sé bien por qué, pero todo el mundo ha reído...

Juan habría querido hacerse el harakiri, si hubiese sabido como se lo hacían los jodidos japoneses para abrirse el vientre...

Él pensaba que no podía aguantar más, en la cada vez mayor escalada de "distinciones" que se producían hacia su persona en el hogar familiar. Por eso, cuando su esposa le dijo que su hermano, el animal del Agapito, se había separado de la mujer y que venia a vivir con ellos, chilló diciendo que no. Que de ninguna manera! Que no cabria en el piso, que...

No le sirvió de nada, naturalmente. Sólo para recibir insultos, y para encontrarse con el hecho consumado de la llegada del "desconsolado" pariente, que comparecía con sus maletas y con su escopeta de caza colgada a la espalda, dentro de su funda, eso sí.

- Dormirá en el comedor, de momento al sofá - dijo Brigida - .Más adelante compraremos un sofá cama, para que esté más cómodo...

- Qué quiere decir más adelante! No era una medida provisional, mientras no encuentre un piso para él solo?

- Cuesta hoy encontrar un buen piso un poco bien de precio, Juanl. A parte de que él tiene un buen sueldo y podrá aportar una parte, que buena falta nos hace contigo en el paro..

- Si madre - dijeron las niñas - .Que el tío Agapito en muy "enrollado" y ha prometido llevarnos un día a cazar con él.

- Pero...

- Deja ya de poner pegas, Juanl! Está decidido. El pobre Agapito está muy triste por causa de la separación y hemos de consolarle. A ver si también fracasas en eso! Mira de distraerlo, de llevarlo a pasear...

Pero el tío Agapito no parecía muy afectado por su desgracia. Más parecía como si se fuera liberado, contento como unas pascuas...

De seguida se hizo el amo del comedor. Del comedor y de la "tele", o mejor dicho del mando a distancia. Y como que le gustaba mucho el fútbol, entonces todo el día veían por la pequeña pantalla señores en pantalones cortos corriendo detrás de una pelota. Y, todavía peor, inacabables tertulias de doctos ancianos discutiendo hasta la extenuación si era mejor que jugase Ronaldinho por la derecha o por el centro...

Y el olor a tabaco?

Juan había sido un fumador empedernido, pero lo había dejado por exigencias de su consorte. Y ahora, cuando sentía el olor a tabaco que fumaba el cuñado, le venían como unas arcadas, un malestar...

- Cómo quieres que le prohiba que fume, hombre de Dios? Con el disgusto que está pasando, nada más faltaría...

- Es que me está matando. No soporto el olor del tabaco. Y tampoco esa música que escucha de noche, cuando estamos ya acostados. Si al menos le gustase la música normal...

- La música étnica de Africa ecuatorial es muy normal, Juan. Él vivió allí una temporada y se quedó enamorado. Le sirve de consuelo...

- No sé si lo podré aguantar, Brigida. Esto es más fuerte que yo!

- Y tanto que lo aguantaras! Anda, girate y duerme, que mañana será otro día...

A la mañana siguiente, Juan sintió un escozor en la espalda. Se palpó y notó como unos pequeños bultos a cada costado, una cosa dura, como si los omoplatos le creciesen.

No dijo nada, naturalmente. Debían ser manías suyas. Y además, su mujer, seguro que le diría alguna cosa desagradable, ya la sentía: Debe ser el hueso de la espalda, el hueso de la ganduleria y del fracaso! Perdedor, más que perdedor...! Seguro que me suelta alguna fresca!

Todo el día sintió aquella molestia presente, y le parecía que cada vez se hacia más fuerte.

En la soledad del lavabo, a media tarde se lo fue a examinar. No se lo veía bien. Por muchas posturitas que hacia delante del espejo, no conseguía poner las misteriosas prolongaciones delante del espejo. Pero sí, se habían hecho más gruesas, casi le salían de la espalda un par de centímetros... Eran como... no lo sé!... como unas alitas de pollo.

Naturalmente se asustó. Pero el cuñado ya había llegado del trabajo y decidió callarse. Después en la habitación hablaría con Brigida...

Se puso la camisa y la bata de estar por casa, y se sentó en el sofá, que hacia olor a tabaco y a sudor del pariente.

- Hola, Juanl! Cómo vas? Mira, hoy veremos el partido de semifinales de la recopa, juega el Almería contra el Salermo de Italia. Quién crees que ganará?

- No sé, ya sabes que a mi eso del fútbol no me interesa mucho...

- Ya te aficionaras, hombre! Cuando lleves unos años viendo estos partidos tan interesantes, ya veras como te acabara gustando! -

- No le hagas caso, Agapito - intervino Brigida, sentada en la butaca - , a mi marido le gusta mucho llevar la contraria. Siempre lo hace, pero al final todavía agradece que le fuercen a hacer cosas que al principio no le gustan...

- Si, ya lo sé! Si en el fondo le interesa más el fútbol que a mí!

Juan calló. Tenía que hacer alguna cosa, tenía que imponerse! Pero cómo? Él era así, tímido y poco decidido, y su mujer le tenía tan dominado que era inimaginable que se rebelase.

Cenaron con la televisión a toda pastilla, explicando la causa del empate a cero que había conseguido el equipo andaluz. Una gesta comparable, según los tertulianos, a la conquista de la Luna o al descubrimiento de América.

- Te ha gustado el partido, eh?- dijo Agapito- Pues mira. Esto también te gustará... Me he comprado un disco al "top manta" que es una pasada. Se trata de un concierto de tam-tam de Kenia con el coro de mujeres de la tribu de los Watussi, que es buenisimo. Un poco ruidoso, pero muy interesante...

Aquella noche, en la cama, al lado de su mujer, Juan se revolcaba, agitado por el nerviosismo y por la incomodidad que le provocaban las dos alitas de la espalda... Mientras en el comedor sonaba la música rítmica y monótona de las selvas centroafricanas, Juan probaba de introducir el tema. Cómo debería de decirle a su pareja "eso" de las protuberancias...?

- Escucha, Brigidita mía... Me ha salido unos... unos alerones aquí en los omoplatos que...

- Qué dices de alerones, ni de puñetas! Debe ser los huesos de la espalda que no te dejan trabajar, gandul, más que gandul! Anda, calla y dejame escuchar el disco de mi hermano. Es bueno, eh? Tiene un gusto exquisito Agapito! Mi padre siempre lo decía: este chico será un artista!

Poco a poco, Juan entró en un estado de letargo, medio adormilado por el ruido de los timbales selváticos y por el compás rítmico de los ronquidos conyugales..

Soñó.

Soñó cosas terribles.

Era una gallina, la última del gallinero, la que todo el mundo picaba y la que no tenia a nadie para picar. El gallo la sometía a un trato vejatorio, abusaba de ella delante de las otras gallinas, que cloqueaban sin parar.

Se despertó entre un grito de angustia. Se incorporó, y sentado en la cama se llevó la mano hacia atrás. En la espalda alguna cosa muy gruesa que le hacia daño se doblaba entre las sabanas...

- Quieres estarte quieto Juan?! dijo Brigida sin llegar a despertarse.

- Si, amor mío...

Se palpó las adherencias, que habían crecido desorbitadamente. Ahora eran como dos velas. como si le hubiesen enganchados dos velas de balandro. Pero el tacto... El tacto era como si fuesen plumas!

Corrió hacia el baño, a oscuras, por no acabar de despertar a la terrible Brigida. Aquellas "cosas" arrastraban por tierra, pero las sentía vivas, fuertes, como si siempre hubiesen formado parte de su anatomía.

Con la puerta cerrada encendió el fluorescente de encima del lavabo y ahora si que hizo un grito de espanto.

En la espalda se veían dos alas enormes como de águila, como de halcón... No, como de palomo, bien blancas, llenas de plumas blancas...

Movió con fuerza la espalda, adelante y atrás, y las nuevas extremidades se alzaron majestuosamente, regias... pero chocaban contra las paredes laterales, contra las baldosas rosadas del cuarto de baño.

Detrás suyo, sintió un grito ronco, un grito agónico. Y le siguió una pregunta en tono acusatorio, de reprobación...

- Se puede saber que es esto, Juan? Qué haces aquí con este disfraz de ángel?

Bajó las alas y vio a través del espejo el rostro huesudo y anguloso de su mujer, orlado con decenas de rulos de colores que le estiraban los pocos cabellos teñidos de rubio, y le daban un aire de careta trágico-cómica entre el rostro de la Medusa y la carota de una falla de Valencia..

Esta aparición le encendió la luz, le reveló el por qué de todo. Las alas que le habían crecido en la espalda eran un  regalo del cielo, una ayuda impagable de los dioses, para que pudiera ganarse la libertad.

Tendría bastante con posarse sobre la barandilla del balcón y lanzarse al vacío. Después, comenzaría a agitar a aquel dúo extraordinario y se pondría a volar, cielo adentro, huyendo por fin de la esclavitud de su mujer, aquel sargento que le martirizaba, de sus hijas. cómplices muchas veces de la madre, y de su cuñado, brutal y egoísta...

Aprovecho que Brigida salía al pasillo. gritando como una loca, para correr hacia el comedor, abrir la puerta del balcón, y ejecutar su plan.

Pronto se encontró flotando en el aire, planeando con todas las plumas, con una sensación de libertad, de ligereza que valía un imperio. Después, comenzó a agitar las alas, y comprobó que sabia hacerlo perfectamente, que volaba como un pájaro. Era sencillo impulsarse hacia delante, girar, relajar los músculos para perder impulso.

- Agapito. Agapito! - sintió aquella voz estridente, que tan bien conocía, que gritaba a su espalda -. Agapito! Haz alguna cosa que se escapa. Juanl se escapa! Se va. Me abandona a mi... a las niñas..."!

En aquel momento supremo, Juan dudó. Sintió las vocecitas de sus hijas, ya lejos, que gritaban:

- Papa, papa! Dónde vas?

Paró el vuelo y se quedó un momento planeando en el aire.

Entonces vio a su cuñado, Agapito, que le apuntaba con la escopeta de caza. Se dio cuenta demasiado tarde, cuando los dos agujeros negros, tan juntos, que aparecían dos ojos acusadores, desaparecieron detrás de un estruendo fuego y de humo.

Probó de emprender de nuevo el vuelo, pero una lluvia de perdigones le quemó la carne, al mismo tiempo que sentía como un trueno ensordecedor. Forcejeó para recuperar el dominio de sus alas, tan nuevas, pero una segunda lluvia de plomo lo precipitó hacia el suelo, hacia el asfalto.

Mientras caía, todavía sintió la voz estridente de su mujer que exclamaba:

- Pobre Juanl! Ha sido un perdedor hasta el final...!

martes, 14 de octubre de 2014

Los relámpagos

Los Relámpagos fueron un grupo instrumental español formado en Madrid en 1961. Sus grandes influencias eran los grupos estadounidenses Johnny and the Hurricanes y The Shadows. Este tema es un arreglo moderno de una canción popular catalana cuya traducción al castellano es Noche de relámpagos y el ritmo, un 3/4, es el típico de una danza popular catalana: la sardana

viernes, 10 de octubre de 2014

Con buen pie

Hoy me he levantado con buen pie y voy a ser optimista. Por lo tanto debo decir que el actual modelo de capitalismo financiero está en trance de desaparición, igual que en su día lo hizo el capitalismo Keynesiano y el principal motivo es el aumento desproporcionado de la desigualdad entre los más ricos y los más pobres. Los ricos (8% de la población mundial) tienen el 82% de la riqueza y los pobres (69%) tienen menos del 4%. Lo sueldos de los directivos suben un 6,9% y los de los trabajadores bajan un 0,47%. Los mercados mandan demasiado y los representantes del pueblo (los políticos) están sometidos a los mercados (la banca y los inversores). Pero esto cambiará porque los nuevos políticos serán muy diferentes a sus predecesores, no tanto porque ellos quieran cambiar, sino porque la ciudadanía se lo exigirá y la administración volverá a ejercer su papel de estabilizador económico. Por eso casi nada será igual, sino mejor. Así lo indica la historia de la economía y las represalias de la población a los representantes que los decepcionan. Si finalmente no sucede así, cosa que sería sumamente sorprendente, yo me habré equivocado y el mundo habrá perdido una gran oportunidad para ser mejor.

Yo soy un hijo de África del Sur
Soy una niña de Vietnam
Yo soy un hijo de Irlanda del Norte
Soy un chico pequeño con sangre en sus manos
Sí soy un niño del universo
Sí soy un niño del universo
Me puedes ver en la televisión todas las noches
Siempre allí para unirme a otra persona y luchar.

Yo no pedí nacer y no pido morir
Yo soy un sueño interminable, una máquina genética
No por qué.

Sí soy un niño del universo
Sí soy un niño del universo
Puedes verme en la televisión todos los días

Yo soy el chico al lado de unos tres mil kilómetros de distancia.


jueves, 9 de octubre de 2014


Hay algo que nos deja pensando sobre nosotros mismos, al ver esta secuencia de fotos.                                                                                                                                                               
http://www.nytimes.com/interactive/2014/10/03/magazine/01-brown-sisters-forty-years.html?_r=0



sábado, 4 de octubre de 2014

Mi ciudad

Mi ciudad ha perdido
rincones y recuerdos.
Quedan algunas huellas,
apenas un bosquejo.
Hay plazas escondidas,
algún palacio enhiesto
que resiste imbatible,
trazos de cal y albero.
Sabor a sal antigua,
viñedos polvorientos,
pinares embrujados,
playas de arena y fuego.
Dominando horizontes,
el mar, algunos cerros,
la ermita allá en lo alto
y un castillo a lo lejos.
Entre medias un río,
laberinto de esteros
enfrentado al olvido,
aferrado a lo eterno.
Brisas que siempre llevan
olor a vino añejo,
promesas imposibles
que nunca se cumplieron.
Mi ciudad cuenta historias,
se las susurra al viento
que gime en las callejas
y alborota los sueños.
Es difícil oírlas,
hay que ponerle empeño.
Hay que abrir los sentidos,
hay que engañar al tiempo.


                                 Cristina Díez