domingo, 30 de septiembre de 2018

Regelinda

La enorme sonrisa de Regelinda, una mujer de la nobleza polaca que vivió en el siglo X, rompe radicalmente con el hieratismo de las representaciones de la época medieval y llega hasta nuestros días con una frescura despampanante propia de una diva de Hollywood. La obra se puede observar en la catedral de la ciudad alemana de Naumburgo y es obra del llamado "Maestro de Naumburgo", un escultor anónimo de excepcional talento que desarrolló su trabajo en el norte de Europa, eso sí, doscientos años después de la muerte de la noble señora, por lo que debió de tomar como modelo a otra mujer de gran belleza.


EL PASAPORTE DE RAMSÉS II...

EL PASAPORTE DE RAMSÉS II...
"Según el derecho francés, cualquier persona que entre en el país, da igual si está viva o muerta, debe contar con un pasaporte válido. Así que, cuando en 1974 el gobierno egipcio mandó la momia de Ramsés II a París para someterla a distintas pruebas, tres mil años después de su muerte, al faraón le fue expedido un pasaporte nuevo que le permitió viajar a Francia."
Fuente: Archaeology News.


martes, 25 de septiembre de 2018

Turne

Cuando le preguntaron a Turner cómo había conseguido captar la emoción que reflejaba su "Tormenta de nieve" pintado en 1842 contestó que: 

"Pinté el cuadro para mostrar cómo era una escena así, no para explicarla; para observarla, hice que los marineros me ataran al mástil y así permanecí durante cuatro horas; pensé que de ahí no salía, pero que, si lo lograba, mi deber era plasmar aquella escena”.

Tuner, romántico empedernido es posible que estuviese bien exagerando un poco bien inventándose la anécdota vilmente, ya que, cuando pintó su tormenta, contaba 67 años.

Dicho esto, si Turner tuviese un correlativo en el mundo de la fotografía, sería la fotógrafa inglesa Rachael Talibart, que para llevar a cabo su proyecto "Sirens" se jugó algo más que la cámara (aunque no sabemos si ella también pidió ser atada al mástil).







Que a nadie se le olvide que los seres humanos no pertenecemos a nadie.

Que a nadie se le olvide, que desobedecer es casi una obligación cuando lo que se pide es injusto.

Que a nadie se le olvide que tenemos pensamiento y voz propia.

Y que nadie es más que nadie.

Y una cosa es cierta. Cuanto más obediente seas. Peor te trataran...


sábado, 22 de septiembre de 2018

Roque Dalton

Yo como tú
amo el amor,
la vida,
el dulce encanto de las cosas
el paisaje celeste de los días de enero.

También mi sangre bulle
y río por los ojos
que han conocido el brote de las lágrimas.
Creo que el mundo es bello,
que la poesía es como el pan,
de todos.

Y que mis venas no terminan en mí,
sino en la sangre unánime
de los que luchan por la vida,
el amor,
las cosas,
el paisaje y el pan,
la poesía de todos.

Roque Dalton




viernes, 21 de septiembre de 2018

MOUSSA AG ASSARID

TÚ TIENES EL RELOJ, YO TENGO EL TIEMPO...
A veces conviene despojarse del férreo hermetismo que aprisiona nuestras vidas urbanitas y desnudarse ante la vida para conocer nuestra verdadera esencia y felicidad. Abandonar ese politiqueo de circo que se inunda de los mass media y de enemigos del equilibrio para ahondar en una dimensión más humana y sincera. Ese retorno y fluido libre, son el alimento que nos libera de esa esclavitud y celeridad, tan propia del consumismo diario que vivimos en las sociedades avanzadas.
Hace un par de días me topé con una entrevista muy especial que empecé a leer por curiosidad y terminé enmarcando como si se tratara de un trofeo de incalculable valor existencial. Me refiero a MOUSSA AG ASSARID, un tuareg que un dia abandonó el desierto para abrazar la cultura de la ciudad. Recomiendo su lectura.
Moussa es tuareg. Tiene cerca de 30 años y cautiva con la suavidad de sus gestos, la dulzura de su voz y lo que cuenta. Un día, en un bar, charló al azar con un desconocido acerca de su añorado mundo. Y resultó ser un editor… que se empeñó en publicarle "En el desierto no hay atascos. Un tuareg en la ciudad" (Ed. Sirpus). Hoy este libro es todo un éxito en Francia, y Moussa, sin buscarlo, es ya una celebridad mediática. Moussa interpreta este hecho como un designio y lo aprovecha para defender la vida nómada y pastoril de los tuareg. Nació en un campamento nómada tuareg, entre Tombuctú y Gao, al norte de Mali. Ha sido pastor de los camellos, de cabras, corderos y vacas de su padre. Hoy estudia Gestión en la Universidad Montpellier. Está soltero y defiende a los pastores tuareg. Es musulmán pero sin fanatismos. Escuchemos sus sabias y sencillas palabras.
“El ropaje de los Tuareg es de un azul bellísimo. Para nosotros es el color del mundo, el color dominante, el techo de nuestra casa. Tuareg significa "abandonados", porque somos un viejo pueblo nómada del desierto, solitario, orgulloso: "Señores del Desierto", nos llaman. Nuestra etnia es la “amazigh” (bereber) y nuestro alfabeto es el “tifinagh”. Somos unos tres millones, y la mayoría todavía nómadas. Pero la población decrece... "¡Hace falta que un pueblo desaparezca para que sepamos que existía!", denunciaba una vez un sabio. Yo lucho por preservar este pueblo. Pastoreamos rebaños de camellos, cabras, corderos, vacas y asnos en un reino de infinito y de silencio. Si estás a solas en el silencio, oyes el latido de tu propio corazón. No hay mejor lugar para hallarse a uno mismo.
En el desierto me despierto con el sol. Ahí están las cabras de mi padre. Ellas nos dan leche y carne, nosotros las llevamos a donde hay agua y hierba. Así hizo mi bisabuelo, mi abuelo, mi padre. y yo. ¡No había otra cosa en el mundo más que eso, y yo era muy feliz en él! A los siete años ya te dejan alejarte del campamento, para lo que te enseñan las cosas importantes: a olisquear el aire, escuchar, aguzar la vista, orientarte por el sol y las estrellas. Y a dejarte llevar por el camello, si te pierdes: te llevará a donde hay agua. Allí todo es simple yo profundo. Hay muy pocas cosas, ¡y cada una tiene enorme valor! Allí, cada pequeña cosa proporciona felicidad. Cada roce es valioso. ¡Sentimos una enorme alegría por el simple hecho de tocarnos, de estar juntos! Allí nadie sueña con llegar a ser, porque cada uno ya es.
Lo que más me chocó en mi primer viaje a Europa fue ver correr a la gente por el aeropuerto. ¡En el desierto sólo se corre si viene una tormenta de arena! Me asusté, claro. También vi carteles de chicas desnudas: ¿por qué esa falta de respeto hacia la mujer? me pregunté. Después, en el hotel vi el primer grifo de mi vida. Vi correr el agua y sentí ganas de llorar. Qué abundancia, qué derroche. ¡Todos los días de mi vida habían consistido en buscar agua! Cuando veo las fuentes de adorno en las ciudades europeas aún sigo sintiendo dentro un dolor muy inmenso...
A principios de los 90 en mi tierra natal hubo una gran sequía, murieron los animales, caímos enfermos... Yo tendría unos doce años, y mi madre murió... ¡Ella lo era todo para mí! Me contaba historias y me enseñó a contarlas bien. Me enseñó a ser yo mismo. Convencí a mi padre de que me dejase ir a la escuela. Casi cada día yo caminaba quince kilómetros. Hasta que el maestro me dejó una cama para dormir, y una señora me daba de comer al pasar ante su casa... Entendí que mi madre estaba ayudándome.
Mi pasión por la escuela nació cuando hace un par de años pasó por el campamento el rally París-Dakar, y a una periodista se le cayó un libro de la mochila. Lo recogí y se lo di. Me lo regaló y me habló de aquel libro: “El Principito”. Y yo me prometí que un día sería capaz de leerlo... Y lo logré. Así fue como conseguí una beca para estudiar en Francia. Pero lo que más añoro en Francia es la leche de camella, el fuego de leña y caminar descalzo sobre la arena cálida del desierto. Pero sobre todo las estrellas; allí las miramos cada noche, y cada estrella es distinta de otra, como es distinta cada cabra. Aquí, por la noche, miráis la tele. Tenéis de todo, pero no os basta. Os quejáis. ¡En Francia se pasan la vida quejándose! Os encadenáis de por vida a un banco, y hay ansia por poseer, de sufrir frenesí y tener prisa. En el desierto no hay atascos, ¿y sabe por qué? ¡Porque allí nadie quiere adelantar a nadie!
En el lejano desierto, dos horas antes de la puesta del sol, baja el calor y el frío aún no ha llegado. Los hombres y los animales regresan lentamente al campamento y sus perfiles se recortan en un cielo rosa, azul, rojo, amarillo, verde... Es un momento mágico. Entramos todos en la tienda y hervimos té. Sentados, en silencio, escuchamos el hervor. La calma nos invade a todos, los latidos del corazón se acompasan al “pot-pot” del hervor. Aquí tenéis reloj, allí tenemos tiempo”.
MOUSSA AG ASSARID
Touareg, nómada del desiert


martes, 18 de septiembre de 2018

Eilean Donan

El castillo de Eilean Donan fue destruido por las tropas británicas el 10 de mayo de 1719. Lo que poca gente sabe es que fue destruido con 27 barriles de pólvora de un grupo de soldados españoles, infantes de marina, que se encontraban allí emboscados y que fueron los últimos defensores del castillo.

A ese castillo los había llevado el rey Felipe V y una operación, que junto a la ayuda de los escoceses, tenía como objetivo una invasión “trampa” de la isla británica.

La invasión «trampa» constaba de dos partes:

Una primera fuerza (la más numerosa) se dirigiría hacia el sudoeste de Inglaterra. Desde allí, avanzaría hacia Londres. Este contingente estaba formado (según las cifras ofrecidas por Duro en su obra) por los siguientes hombres:
-4 barcos de guerra.
-25 barcos de transporte.
-Más de 5.000 soldados.
-500 monturas.
-30.000 fusiles.
-Multitud de pertrechos en forma de «pólvora, municiones, mantenimiento» y «algunos señores de calidad escoceses e irlandeses».

Un segundo contingente dirigiría sus pasos hacia Escocia, donde trataría de ganarse el apoyo de los clanes de la zona. Una vez iniciada la sublevación, los recién llegados armarían a los sediciosos y atacarían.
Los números concretos de aquellos que partieron en esta fuerza son discutidos a día de hoy por los historiadores, así como sus unidades de procedencia. Una de las últimas versiones, no obstante, es la ofrecida por Canales y del Rey en su texto:
-2 fragatas.
-1 batallón de españoles de apoyo.
-2.000 fusiles y 5.000 pistolas para armar a aquellos escoceses que decidieran enfrentarse al gobierno inglés.

La primera fuerza tuvo la desgracia que encontró un fuerte temporal, zozobrando la gran mayoría, y los pocos bajeles que sobrevivieron encontraron refugio en el puerto de Vigo.

La segunda fuerza que había salido del puerto de Pasajes (Guipúzcoa) y que su objetivo era llegar hasta Escocia sana y salva y lograr que sus habitantes se alzaran contra Inglaterra. La suerte de estos dos buques (y de sus ocupantes) fue mucho mayor, pues lograron llegar en un breve periodo de tiempo hasta la isla de Lewis (ubicada al norte de la región).
Allí desembarcaron 307 soldados españoles. Allí fueron acogidos por el clan de los Mackenzies a los que les pareció magnifica la idea que tenían los españoles para atacar a los británicos. Desde allí, empezaron a barruntar cuál sería la mejor forma de acceder a otros líderes locales para lograr su apoyo. Una revuelta al más puro estilo William Wallace.
Y así se instalaron los infantes españoles en el castillo Eilean Donan y quedaron a la espera de tener noticias del grueso de la expedición. Una vez enterados del desastre que había sufrido la flota y que la misión ya no tenía posibilidad alguna, se dispersaron por tierras escocesas en busca de crear un ambiente propicio para revelarse contra las tropas británicas con ayuda de los clanes escoceses.

Los británicos enterados del plan enviaron cinco fragatas hacia el oeste de Escocia con el objetivo de dar al traste con los planes de Felipe V en sus tierras.
El 10 de mayo de 1719 y después de que los británicos enviaran un hombre con bandera blanca para pedir la rendición de los españoles y estos negarse, las cinco fragatas bombardearon el castillo antes de asaltar el mismo.
Existen varias versiones que hacen referencia a los españoles que murieron aquel día. Según algunas fuentes, dicen que «en total quedaban “un capitán, un teniente, un sargento y 39 soldados españoles, un mercenario irlandés y un rebelde escocés.

Eilean Donan tampoco tuvo un destino demasiado halagüeño. Después de dejarlo como un colador, los ingleses utilizaron 27 barriles de pólvora de los arrebatados a los españoles para volarlo por los aires. Y así permaneció (en ruinas) hasta que volvió a ser recuperado en 1919. A día de hoy, puede ser visitado para rememorar esta gesta española.




La naturaleza del mundo

Una concepción popular de la naturaleza del mundo, que puede entreverse principalmente en referencias homéricas dispersas, es, grosso modo, la siguiente: el cielo es una semiesfera sólida, similar a un cuenco. El cielo cubre la tierra plana. La parte inferior del espacio existente entre la tierra y el cielo hasta las nubes inclusive contiene neblina; la parte superior es éter, el aire superior brillante que, en ocasiones, conciben como ígneo. Bajo su superficie, la tierra se extiende ampliamente hacia abajo y ahínca sus raíces dentro del Tártaro o sobre él. El vasto río de Océano fluía, según la concepción popular, en torno al borde del disco terrestre (tomado de Kirk y Raven).
¡Qué sencilla era la concepción de los primeros griegos! ¿verdad? Para lo que ellos sabían, lo explicaba todo. Luego ya vendría Anaxágoras afirmando que los astros eran piedras ígneas, lo que le valdría una acusación de impiedad en el 438 a.C.


viernes, 14 de septiembre de 2018

Javier Otxoa

Hay ocasiones en que encontramos a personas sin suerte en la vida, a pesar de que sabemos que merecían mucho más de lo que tuvieron. En el año 2000 un muchacho de 25 años, ciclista profesional, culminó en el mítico Hautacam del Tour de Francia una escapada de 160 km que pasó a la historia de la carrera ciclista. En los últimos y difíciles kilómetros resistió el ataque de un descomunal Lance Amstrong y de otro español de trágico final: Txaba Jiménez.
Javier Otxoa no solo inauguraba su palmarés profesional sino que abría todo tipo de grandes expectativas respecto a su carrera. No todo el mundo tiene tan pronto una etapa del Tour en el bolsillo. Sin embargo, cuando entrenaba al año siguiente con su hermano gemelo (también profesional) por una carretera de Málaga, un coche los arrolló acabando con la vida de su hermano y dejándolo a él entre la vida y la muerte durante varios meses. Los daños cerebrales fueron tales que su carrera acabó, aunque conservó la vida.
No contento con ello, participó posteriormente en dos olimpíadas paralímpicas obteniendo dos medallas de oro y dos de plata. Este hombre, tan querido y desafortunado, acaba de morir de un tumor cerebral a la edad de 43 años. Lo que digo, hay personas que nunca han podido disfrutar de la suerte mínima que todo el mundo tiene derecho a esperar. Descanse en paz. A mí me gusta recordarlo en aquella etapa, el mejor momento de su vida profesional, cuando el futuro se abría para él tan prometedor.




https://youtu.be/6eTLiQJA4qo

jueves, 13 de septiembre de 2018

Hanifa Yousoufi

El pasado 10 de agosto, Hanifa Yousoufi, de 24 años, se convirtió en la primera mujer y cuarta persona afgana en conquistar la montaña más alta de Afganistán, el Noshaq (7492 m), que también es la segunda cima más alta del Hindu Kush. Lo consiguió después de tres años de entrenamiento financiado por una ONG estadounidense.
“Lo he hecho por cada niña afgana. Las chicas de Afganistán son fuertes y lo seguirán siendo”, contaba la protagonista en una rueda de prensa refiriéndose... a las dificultades de las mujeres de su país, cuya vida fuera del hogar tiene muchas más limitaciones que la de los hombres.
A priori nos puede parecer una gesta menor. Pero ser mujer en Afganistan puede que sea una de las cosas más diificiles y peligrosas de este mundo.
Sin duda una gran campeona.





miércoles, 12 de septiembre de 2018

El regalo


EL REGALO

Roberto se sentó a comer con los compañeros de trabajo para celebrar su comida de despedida. Hoy él es el protagonista, le espera la deseada jubilación. Seguro qué le harán un buen regalo, por favor que no sea el típico reloj, pensó. Una sorpresa, la que sea estará bien. Hace por olvidar que él nunca colaboró con un regalo para nadie: ni por un recién nacido, ni por el compañero que se casa ni por el compañero que se jubila. La comida transcurre entre bromas y comentarios sobre que hará con su nuevo tiempo libre. Al acabar, saludos, abrazos, besos y buenos deseos, todo el mundo desfila. Como te queremos! Quedan él y su amigo Raúl. Un camarero se acerca con un sobre en la mano y pregunta por el homenajeado. Por fin, el regalo, se dice Roberto. Que discretos. Cuando lo abre sólo está la factura de la comida de todos y una breve nota: “Gracias por tu generosidad, Roberto! “Nunca es tarde “.





sábado, 8 de septiembre de 2018

Nada Surf

Nada Surf es una banda estadounidense de rock alternativo que actualmente está compuesta por Matthew Caws (guitarra, voz), Ira Elliot (batería), Doug Gillard (guitarra) y Daniel Lorca (bajo, coros). Con sede en la ciudad de New York se formaron en la década de 1990... Sus canciones cuentan historias sencillas que vivimos dia a dia o que recordamos con frecuencia... Simplemente me encantan...

Todo es relativo

No somos nada. Este fantástico vídeo da mucho que pensar....
El mundo es infinito pero a veces no somos conscientes de lo "infinito" que es. Podemos apreciar lo macroinfinito y lo microinfinito para ser conscientes del mundo en el que vivimos e intentar situarnos en él.
En el vídeo se pueden apreciar las escalas del universo y ver lo sorprendentemente pequeños que somos. Partiendo de una persona tumbada en un jardín la cámara se va alejando para captar una realidad más amplia desde la tierra al sistema solar, la vía láctea, las galaxias... hasta captar una cantidad abrumadora de elementos del universo.
Al mismo tiempo, también nuestro cuerpo humano es infinito y podemos ver lo grandes que somos. Las escalas infinitas del ser humano nos llevan desde lo que se ve, nuestro físico, los órganos, la composición de las células, los átomos... hasta lo increíblemente mínimo, lo microscópico y hasta lo nanoscópico.
Un viaje a través de las escalas del universo y del ser humano, hasta donde no llegan ni los telescopios ni los microscopios y que no nos dejará indiferentes.



domingo, 2 de septiembre de 2018

Nova Typis Transacta Navigatio

Del libro "Nova Typis Transacta Navigatio. Novi Orbis Indiae Occidentalis". Autor: Honorius Philoponus (a.k.a. Caspar Plautius). 1621.
Representación de la Isla de San Brandán (monje, navegante, nacido en Irlanda en el años 484 aprox). Dice la leyenda que es una isla que aparece y desaparece. En las Islas Canarias se hace referencia a la Isla De San Borondón, con las mismas características.


sábado, 1 de septiembre de 2018

Barbara Stroz

Barbara Strozi , Venecia (1619/1677) , fue hija ilegítima de un comerciante adinerado quien sin embargo supo reconocer y ayudar en la carrera musical de su "vástago". Con un estilo muy próximo al de Monteverdi fue autora de cantatas que muchos suponen también interpretaban.
Esta cantanta ,"El amante secreto" aparece en 1665 en su segunda pubicación "Cantate, ariette et duetti", dedicada a Ferdinad III conocido por nosotros como : 
Fernando III del Sacro Imperio Romano Germánico o
Fernando Ernesto de Habsburgo y Wittelsbach (Ferdinand Ernst von Habsburg) (Graz, 13 de julio de 1608 - Viena, 2 de abril de 1657) fue Emperador del Sacro Imperio Romano Germánico como Fernando III (coronado el 15 de febrero de 1637), Rey de Hungría y Rey de Bohemia.
En ella la protagonista sufre por un amor que no se realiza y y ese "voglio morire" es una de las clásicas muertes de amor incontables en el arte y por supuesto en la vida.
La estupenda Raquel Andueza la interpreta de maravilla.


Fahrenheit 451

Fahrenheit 451,Novela de Ray Bradbury.
“Los libros están para recordarnos lo tontos y estúpidos que somos. -Son la guardia pretoriana de César, susurrando mientras tiene lugar el desfile por la avenida: `Recuerda, César, que eres mortal´-. La mayoría de nosotros no podemos salir corriendo por allí, hablando con todo el mundo, ni conocer todas las ciudades del mundo, pues carecemos de tiempo, de dinero o de amigos. Lo que usted anda buscando, Montag, está en el mundo, pero el único medio para que una persona corriente vea el noventa y nueve por ciento de ello está en un libro. No pida garantías. Y no espere a ser salvado por alguna cosa, persona, máquina o biblioteca. Realice su propia labor salvadora, y si se ahoga, muera, por lo menos, sabiendo que se dirigía a la playa”