sábado, 9 de septiembre de 2017

Todos vemos la vida con un filtro (dependiendo de nuestra experiencia, de nuestra forma de ser, de nuestra ilusión o nuestros sueños, de nuestras motivaciones...etc...) lo mismo pasa con los caminos.... ¿qué es más difícil nadar en el mar o caminar por montaña? Depende... Pero ningún camino o ninguna travesía marítima creo que sea más difícil que tomar una decisión que a uno le parece importante en la vida como dejar un trabajo, dejar una relación o comenzar una nueva, o irse a vivir al extranjero por necesidad de una vida mejor.... creo que el truco para que ningún camino sea extremadamente difícil es no obsesionarse con él y dejar que fluya... al final, 
fluyendo, a algún lugar llegaremos. Y dejar que tu corazón disfrute del camino... 





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